La cesta de la compra cuesta ahora prácticamente lo mismo que hace dos años, un 0,6% más. | Laura Pons Bedoya

Las alarmantes noticias sobre las bajadas de precios acusadas han quedado atrás. Balears ha superado los peligros de la deflación, y no ha habido caída en el consumo, sino todo lo contrario. El año pasado el PIB creció un 1,9%, el mayor aumento desde 2007. Y los precios, a diferencia del conjunto de España, presentan una tendencia creciente desde hace meses.

En lo que va de año, los precios han subido un 1,08% en las Islas, que es la cifra de inflación de diciembre de 2014 a julio de 2015. El Índice de Precios de Consumo (IPC) mide cómo va aumentando el precio de la cesta de la compra. Se encuentra ahora en 105,078 puntos. En cambio, en el mismo periodo, en el conjunto de España se mantienen inmóviles (han bajado un -0,05%). El IPC se encuentra ahora en 103,418 puntos, cuando en enero de 2011 ambos indicadores se indexaron a 100 puntos (es decir, que parte de la misma base).

El año pasado fue de bajada generalizada de precios. En 2014 la inflación (la variación del IPC en 12 meses) fue del -0,79% en Balears, de nuevo por encima del -1,04% de España. Y en 2013 habían subido un 0,48% en Balears y un 0,25% en el conjunto del país. Si se tiene en cuenta la inflación media anual, un número ponderado de la variación de los precios mes a mes, los datos varían a la baja, pero relevan igual que en las Islas los precios son, en general, más altos. Mes a mes, la media sale negativa este año, aunque desde mayo los datos son positivos.

Si se tiene en cuenta la inflación subyacente, que no contempla los alimentos no elaborados ni los productos energéticos (y, por lo tanto, es mucho más estable y está menos expuesta a shocks externos), en Balears ha sido del 0,53%, mientras que en España ha sido negativa, del -0,48%.

En cambio, desde mediados de 2013 y sobre todo a partir de octubre, la variación de los precios comenzó a ser mucho menor, incluso con tasas anuales negativas. Desde principios de 2015, esta tendencia se ha invertido, y las tasas anuales empiezan a crecer desde el -1,1% de enero hasta el 0,6% positivo del pasado mes de julio. Finalmente, en los últimos dos años (comparando junio de 2013 con julio de 2015), la inflación ha sido del 0,6%.

El profesor de Economía Aplicada de la UIB Jaume Rosselló analiza esta situación: “En general, ha habido un estancamiento de los precios en los dos últimos años en Balears. En qualquier caso, cabe destacar cómo el incremento de precios en Balears, aunque es muy escaso, se ha mantenido por encima de la media nacional. La lectura que hago es que en el resto del país la crisis ha sido más fuerte, y que esto ha supuesto una contención de precios más fuerte que en el resto de España”, afirma.
La inflación este año es en Balears del 0,6% frente al 0,1% del conjunto del Estado, y la balear es la más alta del país. Le siguen Catalunya (0,4%) y Valencia (0,3%), y ocho comunidades registran crecimientos negativos, es decir que están deflación técnica.
En este nuevo marco de precios con tendencia positiva, hacer la compra de siempre se vuelve más caro, pero no todo sube de la misma manera.

¿QUÉ SUBE Y QUÉ BAJA? Desde principios de año, la tendencia en los diferentes productos es similar en España y en Balears, pero en las Islas las cifras son un poco más altas. ¿Qué artículos han subido más y cuáles han bajado en lo que llevamos de 2015 en Balears? Por grupos de consumo según la finalidad (grupos COICOP), lo que más baja, y con diferencia, es el vestido y el calzado (-15,14%). Bajan, pero muy poco, el menaje (-0,74%) y la vivienda (-0,20%). El resto de sectores sube muy poco, con variaciones de menos del 1%, y los que tienen más inflación son el transporte (3,01) y las bebidas alcohólicas y el tabaco (1,34%).

Para mirar producto por producto, hay que tener en cuenta la inflación media anual (si solo se mira la variación de enero a julio, los grandes cambios se presentan en vestido, -12%, debido a las rebajas, y en hoteles y otros alojamientos, que suben un 68% porque se comparan los precios de temporada baja con los de la alta).

De este modo, con respecto al periodo de enero a julio de 2014, los artículos que más han subido son los aceites y grasas (11,66%), las frutas frescas (17,67%), las frutas en conserva y los frutos secos (12,33%) y los preparados de legumbres y hortalizas (8,99%). También suben de manera considerable los servicios médicos (5,10%), los crustáceos, moluscos y preparados de pescado (5,10%) y la carne de porcino (4,70%).

En cambio, lo que más baja es el transporte personal (-8,56%), la leche (-8,06%), el azúcar (-7,73%), otros preparados alimenticios (-7,57%), los electrodomésticos y reparaciones (-7,19%) y los objetos recreativos (-6,26%).

Visto por grupos especiales, los alimentos sin elaborar aumentan un 3,37% y los productos energéticos, un 3,76%.

Un tema aparte es el de la gasolina. Desde enero, los carburantes y los combustibles suben un 3,03%, mientras que en el resto de España lo hacen un 1,36%. Para los expertos consultados, la bajada del precio del petróleo todavía no ha repercutido en el precio que pagamos por la gasolina en las Islas: es decir, que los consumidores de Balears no hemos notado todavía todos los efectos de un barril de Brent muy barato. Según predicen, el precio de la gasolina en las Islas bajará en los próximos meses, y más con la tendencia creciente de gasolineras low cost.

EL FUTURO. Para el profesor Rosselló, un petróleo a la baja es, en general, una buena noticia para la economía española en general y para Balears en particular. “Evidentemente, esto es un factor que favorecería directamente la bajada del IPC”, puntualiza.

Por otra parte, su opinión sobre el impacto de China sobre los precios será a la baja: “Si la economía china sigue presentando dudas, y estas dudas se acaban traduciendo en un crecimiento menor de lo esperado, la bajada del precio del petróleo se consolidará y la bajada de precios se trasladará a otras materias primas, que también incidirían en la bajada del IPC. En cualquier caso, según las previsiones macroeconómicas, la economía española parece que definitivamente está volviendo a una senda de crecimiento motivado por una fuerte demanda interna, que podría suponer presiones al alza del IPC. Aunque habrá que esperar para saber cuál es el resultado de ambas fuerzas, yo apostaría que a medio plazo los precios se mantendrán”, concluye Rosselló.