Una vista aérea de la prueba disputada este año, que contó con más de 1.900 participantes. | ultimahora.es

Desestacionalizar es el gran reto del turismo balear. Promocionar el golf, el senderismo o el ciclismo son algunas de las apuestas que contribuyen a mejorar las paupérrimas cifras de viajeros en temporada baja.

Acontecimientos como la TUI Marathon o el Thomas Cook Ironman Alcúdia son algunas de las pruebas deportivas que contribuyen a la desestacionalización, pero no hay estudios rigurosos sobre el impacto económico y el número de turistas que visitan Balears para practicar su deporte o hobby favorito. En todo caso, el número de cicloturistas se sitúa entre los 80.000 y los 140.000, que entre el total de turistas es casi irrelevante pero que debe ser considerado como muy importante puesto que la práctica totalidad llega a Balears en temporada baja.

Las profesoras de la UIB Maria Antònia Garcia y Margalida Alemany han estudiado el impacto económico de la denominada Mallorca 312, una prueba cicloturística organizada por el Club Ciclista Artanenc que este año ha cumplido cinco años. El resultado ha sido, sencillamente, espectacular.

El estudio se realizó por vez primera el pasado año y cifró el impacto económico de la prueba en poco más de dos millones de euros. La cicloturistada contó en 2013 con un total de 1.143 participantes, que supusieron 1,8 turistas por dorsal con una estancia media de 6,8 días. Además, el gasto medio se estableció en 143 euros, lo que supone un montante total ligeramente superior a los dos millones de euros.

El estudio de la edición de 2014 no está aún finalizado, pero si consideramos que el número de participantes se ha incrementado de forma sustancial hasta alcanzar los 1.950 cicloturistas, se puede aventurar que el impacto económico de la Mallorca 312 habrá superado este año los tres millones de euros.

El estudio económico de 2013 ha facilitado que la sensibilidad de las instituciones públicas haya aumentado, aunque la Mallorca 312 no necesita grandes apoyos económicos.

La prueba se apoya sobre tres grandes pilares desde su primera edición: Xisco Lliteras, director general; Miquel Alzamora, director deportivo, y Llorenç Fluxà, consejero delegado del Iberostar Playa de Muro, de 4 estrellas, y del Iberostar Playa de Muro Village, de cinco, principales patrocinadores del evento.

La prueba está organizada por el CC Artanenc, una entidad deportiva sin ánimo de lucro y con un objetivo prioritario: la promoción del deporte.

Contribuir a la desestacionalización es otro reto para los organizadores, que tienen en Iberostar a su mayor aliado e impulsor.

CINCO EDICIONES.
La primera edición se realizó el cinco de junio y quedó claro que el calor era excesivo para una prueba tan exigente. Desde entonces se celebra el último sábado de abril, cuando la temporada turística se inicia.

Llorenç Fluxà, consejero delegado de Iberostar Playa de Muro, recuerda que en la primera edición las estancias fueron escasas, pero reconoce que el 2014 ha sido excelente. “Hemos llenado el Iberostar Playa de Muro y el Iberostar Playa de Muro Village durante toda la semana de la Mallorca 312, pero desde muchas semanas antes de la disputa de la prueba”, explica Fluxà, “por lo que también se han beneficiado diferentes establecimientos de la zona”.

La organización de la Mallorca 312 ha destinado este año dos euros de cada inscripción a Unicef y Tots per la Serra. Además, cada vez que se hace una inscripción se tiene la oportunidad de subir tu aportación. La prueba deja sustanciales beneficios en Mallorca, aunque no deja réditos económicos al CC Artanenc. “El club está dotado de unos medios que son posibles gracias a la Mallorca 312”, asegura Xisco Lliteras.

El Iberostar Playa de Muro ha estado vinculado desde la primera edición con la Mallorca 312. Se trata de un establecimiento con un enfoque claramente deportivo, puesto que en 2013 hasta un 30% de la facturación y poco menos del 40% de las estancias no estuvo vinculada al turismo de sol y playa. Abre sus puertas habitualmente durante la segunda semana de enero, acoge a la totalidad de los participantes de la Challenge Vuelta Ciclista a Mallorca y cierra en los primeros días de noviembre.

LA PRUEBA. La edición de 2014, con más de 1.900 participantes, supuso un nuevo hito en la prueba. En principio, el director general Xisco Lliteras considera que la prueba tiene aún un margen de crecimiento, que podría situarse en los 3.000 cicloturistas.

La Mallorca 312, siempre con salida y llegada en el hotel Iberostar Playa de Muro, mantiene desde su primera edición dos recorridos, que cuentan casi con idéntico número de participantes -la mitad del total cada uno-. El más largo tiene 312 kilómetros y la alternativa son exactamente 167.

La prueba se inicia siempre a las siete de la mañana y el control de llegada se cierra a las nueve de la noche. En la presente edición se batió el récord de la prueba larga, completando los 312 kilómetros con un tiempo de 9 horas y ocho minutos.

“Miquel Alzamora llegó a la presidencia del club CC Artanenc después de su etapa como ciclista. Valoramos organizar una prueba que pretendemos que llegue a consolidarse como una cita ineludible. Comenzamos con la Mallorca 312 en 2010, pero antes habíamos realizado dos ediciones para los miembros del club”, explica Lliteras, que recuerda que en cinco años han pasado de 199 participantes a 1.950.

El CC Artanenc no deja de pensar en el deporte y están meditando ya la organización de una prueba de mountain bike popular. Nada hay decidido todavía, aunque este año realizarán una edición cero, de prueba, en la que solo se testará el posible recorrido y se comprobará que todo el trayecto previsto sea transitable, sin barreras en ningún camino.

En principio, seran un prólogo y dos etapas con un total de 212 kilómetros. “Queremos dar un impulso a esta modalidad. No hay una prueba de participación masiva en Mallorca. La idea es que se celebre los últimos días de octubre o los primeros de noviembre para contribuir también a la desestacionalización”, afirma Lliteras, aunque insiste en afirmar que “nada es seguro aún”.