Imagen de la entrega de los Premis Vuit d’Agost celebrada ayer en la salón de plenos del Consell d’Eivissa. | DANIEL ESPINOSA

Con la finalidad de «fomentar y premiar la investigación y la creación en las diferentes disciplinas de trabajo relacionadas con esta tierra» el Consell d’Evissa entregó un año más los Premis Vuit d’Agost, correspondientes a su 20º aniversario, mediante un acto en el Salón de plenos que contó con la presencia de la vicepresidenta primera de la institución, Viviana de Sans; la consellera de Cultura del Govern de les Illes Balears, Fanny Tur y el conseller insular de Cultura, David Ribas, a quien pertenecen las citadas palabras.

El jurado, presidido por Antoni Ribas Costa ‘Toniet’, declaró ganadora del Premio Ocho de Agosto en la modalidad de Artesanía del Barro 2017 la obra presentada con el seudónimo ‘Pájaro’, de Caroline Burcker, técnica barro refractario cocido a alta temperatura 1.200 ºC y que trabajó en ella durante un año. Burcker comentó al PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA que «ha sido toda una sorpresa porque es la primera vez que me presento. ‘El Verano’ es una pose de una modelo que ha posado en mi taller, carece de simbolismo completamente, es el instante entre la modelo y yo».

José Javier Ordóñez Pérez, ‘Javierens’, ganador del premio de pintura con ‘Transmutación’, señaló que también es la primera vez que se presenta a un concurso de pintura y que «la técnica que utilizo es acrílico sobre lienzo y empleo las luces led para que reaccionen con el pigmento».

Por su parte, la modalidad de Fotografía Amateur 2017 ha sido para el trabajo presentado con el seudónimo ‘Tot-sol’, de Toni Planells Riera, por el conjunto de tres fotografías estenopeicas con los títulos ‘Tres mesos a ses Salines’, ‘Tres mesos a Dalt Vila’ y ‘Sis mesos a Sant Jordi’, usando cámaras que fabrica él mismo con una lata de bebida como base y papel fotográfico como negativo. Los miembros del jurado, presidido por Antoni Pomar, quisieron destacar de este conjunto de tres fotos la creatividad, la elección del tema, y que, en la era del megapíxel, una técnica artesanal y rudimentaria ha conseguido unos resultados excelentes. Planells recordó que «en tiempos de tantas imágenes como el actual es bueno mirar un poco hacia atrás y ver imágenes que hace mucho tiempo que no se veían».

Los tres artistas se mostraron muy ilusionados con la idea surgida desde la organización de dar forma a una exposición en la que sus trabajos se pudieran apreciar con más detalle por el público en general. «Una exposición anima mucho a generar más trabajo y a seguir en esto», comentó Javierens al respecto.

Premios desiertos

Una de las novedades de la edición era la incorporación de la categoría de Diseño Gráfico, cuyo galardón fue declarado desierto por unanimidad entre los vocales (Germán Lama, Doralice Souza, Antoni Pomar) al considerar que los trabajos no estaban a la altura del nivel esperable teniendo en cuenta la dotación económica y la repercusión que tendría la obra por representar la identidad de las Festes de la Terra.

Otra de las categorías que no contó con la suerte de tener un premiado fue la de investigación. Vale la pena recordar que allá por el año 1997, cuando estos premios comenzaron, su extenso rodaje constituían un reconocimiento a la labor de investigación histórica que después abrió sus puertas a los demás campos del saber, ya que si bien el Jurado alabó el interés, la inquietud y la laboriosidad de la persona investigadora, así como las temáticas que aborda, señaló que metodológicamente (en la estructuración, en el planteamiento general y en la base científica) se observaron carencias.

Por otro lado, la consellera popular Belén Torres, tras dar la enhorabuena a premiados y participantes, reflexionó que «si este año es en el que se cumple la veintena de esta convocatoria que es un certamen tan importante para conservar y trabajar sobre el Patrimonio y la cultura de Ibiza no se le ha dado la importancia que le correspondía, muestra de ello que se ha quedado desierto el premio a investigación», y agregó que esto «puede ser reflejo del cambio realizado en las bases de la convocatoria que produjo un gran descontento en buena parte de los historiadores» en relación, entre otros, a que para esta edición se pedía un mínimo de tres años residiendo en las islas para poder participar cuando anteriormente era «abierto».

Al finalizar el acto, la consellera Fanny Tur presentó las publicaciones ‘La pell cultural de l’home eivissenc. Estudi de indumentària segles XVII-XX’ de Maria Lena Mateu Prats, premiada con el Vuit d’Agost a la investigación en el año 2015 y ‘El negoci de la sal a l’Eivissa del barroc, 1598-1715’, de Antonio Espino López.