Ensayo de la obra del Grupo Attípico de Santa Eulalia. | Marcelo Sastre

El día 1 de mayo el Teatro España de Santa Eulalia a las 20.30 horas albergará el estreno mundial de la obra de la escritora ibicenca de esa misma localidad Mar Gámez García titulada ‘La fauna del poder' y será representada por el Grupo Attípico. La obra, que se estrenará posteriormente el día 5 en Can Ventosa, fue escrita con anterioridad al surgimiento de Podemos pero augura el fin del bipartidismo y, aunque se pueden encontrar similitudes entre los protagonistas y Mariano Rajoy, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, lo cierto es que está situada en algún país del sur de Europa sin determinar. Gámez actualmente reside en Estados Unidos y desde allí ha querido compartir sus experiencias y expectativas con PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA.

—Empezaste a escribir la obra en otoño de 2013, antes del surgimiento de Podemos. ¿Qué elementos fueron los que te hicieron de disparador para anticiparte a la realidad?
—Siempre he seguido con mucha atención la actualidad política puesto que estudié periodismo y trabajé como periodista durante unos años en Madrid. No participé en la primera protesta del 15 de mayo de 2011 en Sol, aunque vivía en Madrid por aquel entonces, pero sí lo hice al año siguiente. Ese día quedará para siempre grabado en mi memoria. Recuerdo haber sentido una sensación de hartazgo generalizado a mi alrededor y una gran empatía con todos los allí presentes. Me impresionó ver a gente de diferentes ideologías y edades protestando de manera pacífica: niños, jóvenes, adultos, ancianos... Me pareció que aquella indignación no podía desaparecer de la noche a la mañana y que pronto surgirían nuevos partidos políticos para tratar de dar voz a los ciudadanos que no se sentían representados y corregir el sistema. Por eso, cuando llegué a la Universidad de Cincinnati en agosto de 2013 y me pidieron que escribiera una obra de teatro breve para un curso de escritura creativa ese otoño no tuve ninguna duda sobre el tema.

—¿Crees que este tipo de políticas puedan terminar siendo una solución a los graves problemas que afectan a nuestra sociedad?
—Hace unos años, cuando asistí a aquella manifestación, estaba muy esperanzada, pensaba que se podrían cambiar muchas cosas desde un punto de vista político, económico y social, y que habría voluntad política para ello. Hoy, después de haber estado casi un año sin Gobierno en España y tras haber tenido que repetir las elecciones generales y haber sido testigo de la intransigencia y falta de voluntad de nuestra clase política para alcanzar acuerdos entre partidos con ideologías y/o objetivos similares, continúo bastante indignada. Creo que la situación actual de cuatripartidismo es positiva, pero no veo que hayan cambiado mucho las cosas. El presidente del Gobierno sigue siendo el mismo que en 2013 cuando escribí mi obra, pese a los numerosos casos de corrupción en su partido, aunque es cierto que ahora no cuenta con mayoría absoluta, y la izquierda está aún más dividida que entonces, lo que ofrece un panorama desolador. Pese a todo, prefiero ser positiva. Considero que la llegada de nuevos partidos es buena para nuestro sistema político, pues parece que sí están obligando poco a poco a los viejos partidos a reformarse, pero no creo que sean la solución a todos nuestros males

—¿Qué pretendes transmitir?
—Sobre todo quería dejar constancia en la literatura de los efectos de la crisis económica y de la dureza de los recortes que los países del sur de Europa se han visto obligados a hacer y cómo esto ha afectado a sus ciudadanos. También buscaba expresar de alguna manera que el fin del bipartidismo no iba a ser la única solución a todos nuestros problemas porque todos los partidos políticos tienen sus trabas, su lado negativo o alguna persona corrupta dentro de ellos.

—¿Cuál piensas que es el mensaje de la obra?
—Uno de los temas principales de la obra trata sobre la figura del político. Aunque sea muy divertida, mi intención es llegar más allá y hacer cuestionar al espectador sobre las cualidades que definen a un buen político. En este sentido, considero que uno de los mensajes que transmite la obra es que para ser un buen político hace falta ser una buena persona, pero que el ser una buena persona no garantiza ser un buen político.

—¿Cuál ha sido la repercusión? ¿Qué te han contado los lectores al leerla?
—Los lectores con los que he podido hablar me han dicho que se han divertido leyendo la obra y que se han reído mucho. En general, les gusta mucho el personaje del sirviente porque se sienten identificados con él, al ser un personaje gracioso, inteligente y de alguna manera maltratado por el sistema. La verdad, también es mi personaje favorito. Una de las observaciones que más me han gustado vino de la editorial, que me dijo que mi obra era muy imparcial y que eso era bueno porque así podía agradar a un mayor número de lectores. Como periodista que soy o he sido, aunque ahora no ejerza, era muy importante para mí escribir una obra imparcial, que no molestara a lectores o espectadores de una determinada ideología.

—¿Por qué motivo no has manifestado el nombre del país en el que transcurre el libro?
— Porque quería que la obra reflejara la situación vivida en varios países del sur de Europa durante el período de crisis económica y porque uno de mis sueños sería que esta obra se pudiera representar en países como Italia, Grecia o Portugal cambiando solo la bandera de la oficina del presidente.

—¿Qué sensaciones te produce ver la obra representándose en tu pueblo y en Can Ventosa?
—Estoy segura de que será una sensación maravillosa. Para mí es muy importante que el estreno mundial sea en mi pueblo, en el Teatro España de Santa Eulalia. Espero que la gente de mi pueblo lo disfrute y poder sentir su cariño. Es la primera obra de teatro que escribo y tengo muchas ganas de conocer la reacción del público.
Recuerdo haber ido de pequeña a actuar al Teatro España a cantar villancicos cuando estudiaba en el Colegio San Ciriaco y haberme sentido impresionada por la belleza de aquel edificio. También recuerdo haber ido un poco más mayor a Can Ventosa con mis profesores y compañeros de clase y vivir la representación de una obra de teatro como un evento extraordinario e inolvidable. Me llena de orgullo poder regresar de nuevo a esos dos edificios, esta vez de adulta, y poder ver mi obra representada en ambos teatros.

—¿Nos puedes adelantar algún detalle de la obra? ¿actores, escenografía?
—Te diré que en Ibiza tendremos una puesta en escena muy novedosa y original porque hay una escena en la que la Troika viene a cantarle las cuarenta al presidente y sus representantes le hablan en inglés. Como el presidente no sabe inglés, necesita los servicios de una traductora y esta se inventa gran parte de los diálogos porque teme ser despedida. Esa parte es muy cómica. Los diálogos en inglés se mostrarán con subtítulos en español como si estuviéramos en el cine. Tengo muchas ganas de ver cómo queda esa parte.

—¿Cuál es la compañía de teatro que lo interpretará en Ibiza? ¿Y en Madrid? ¿Tienes fecha ya para el estreno en Madrid?
—La compañía de teatro que la representará en Ibiza es el Grupo Attípico de Santa Eulalia, en Madrid será una productora de teatro profesional llamada Diágoras Producciones. El estreno en Madrid será el 15 de noviembre. Estaremos un total de diez miércoles en uno de los teatros privados y comerciales más importantes de Madrid hasta el 17 de enero de 2018. La compañía ya ha firmado el acuerdo pero no el contrato, por eso no quiero revelar el nombre del teatro todavía aunque ya tenemos todo el reparto seleccionado. Sobre la puesta en escena de Madrid no sé mucho todavía, ya que quedan bastantes meses hasta el estreno. De los actores, no puedo dar nombres, pero sé que dos de ellos, el presidente y uno de los líderes del partido minoritario, son gente bastante conocida en el mundo del teatro y que han salido también en televisión y cine.