Se trata de una documentación que ocupa 57 carpetas y 162 cintas de casete y que llega al Arxiu en buen estado. La intención, manifestada ayer por la alcaldesa, es la de exponer el material al público en 2014, fecha sugerida por Fanny Tur por coincidir con el 90 aniversario del nacimiento de Fornàs y el 20 aniversario de su fallecimiento. Además, tal y como recordó Sansano, dicha fecha permitirá también al personal del Arxiu el poder catalogar convenientemente todo el legado, una tarea que incluirá la digitalización de los audios y de la documentación.
«El material tiene un importante valor histórico —apuntó Sánchez-Jáuregui— y estamos muy agradecidos de que pueda formar parte del Arxiu. Cuidaremos de él y de su difusión y estudio para conocer la historia de nuestra isla».
Por su parte, Mestre Riera recordó la figura de su tío, a quien calificó como «una persona ilusionada por todo». «Le he visto desde siempre, dibujaba, investigaba, recopilaba... Vivió muy intensamente y muy de cerca nuestra tradición oral». Al referirse a los documentos recibidos como herencia, la sobrina de Fornàs añadió: «No podía dejarlos en mi casa, porque creía que se tenían que dar a conocer, tenía que reconocerse su labor. Era muy metódico, muy ordenado y muy ilusionado por todo».
El legado incluye literatura oral, romances, canciones de todo tipo, desde religiosa a tonadas de carácter picante... «la propia de cualquier tradición oral», remarcó Mestre quien hizo hincapié en el hecho de que, en muchas ocasiones, la labor de Fornàs no se limitaba solo a registrar y archivar, sino que también recogía diversas versiones de una misma narración (ibicenca, catalana o mallorquina, por ejemplo) para compararlas.
Finalmente, la titular municipal de Cultura remarcó que «no se trata de una donación de material viejo, es un material compuesto por trabajos de campo de uno de los etnógrafos más importante de Eivissa y Formentera. Es un material de primera para los investigadores y es también imprescindible».
Militar
Vicent Tur Guasch, Fornàs nació en la localidad de Sant Llorenç en 1919 y falleció en Eivissa en 1994. Fue militar de profesión, aunque sus inquietudes le llevaron a interesarse por la pintura (practicó la acuarela y el dibujo) y, más principalmente, por el folclore y la investigación. A él y a su mujer se les conocía como Xacoters de Balàfia.
Fue esa procedencia de un pueblo de interior en una isla la que facilitó, según recordó Mestre, que tuviera una convivencia directa con las tradiciones orales de las Pitiüses. Además, su sobrina observó como la afición de Fornàs por la pintura le permitía también ilustrar algunas de sus investigaciones con sus propias obras.
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