Una imagen del artista marroquí que forma parte de la exposición.

Una imagen del artista marroquí que forma parte de la exposición.

L.TurEivissa14/01/12 0:00
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La Casa de Cultura del municipio valenciano de Burjassot inauguró a principios de esta semana la exposición conjunta De Ibiza y Nueva York, que reúne la obra del profesor de arte Nabil El Hadri y la artista ibicenca Dora Marí. La muestra podrá visitarse hasta el día 20 de este mes. Vertical, horizontal y movimiento es el título bajo el que se aúnan las obras del artista marroquí, que comenzó a trabajar en esta serie durante un viaje que realizó a la ciudad de los rascacielos. Ahora, las treinta piezas que reflejan diferentes imágenes de postal que forman parte del imaginario colectivo, han sido incluidas en esta muestra.
Puntillismo, arte figurativo o expresionismo abstracto son algunas de las técnicas y estilos que predominan en esta parte de la exposición. «Son dos ciudades que no tienen nada que ver», comenta El Hadri, que añade: «Mientras que en Eivissa domina la tranquilidad, Nueva York es enorme y tremendamente caótica». Pese a que la diferencia de ambas ciudades, los artistas no dudaron a la hora de combinar su trabajo, como habían hecho en ocasiones anteriores.
La ibicenca Dora Marí, por su parte, ha querido reflejar los recuerdos de su infancia, los lugares que siempre ha visitado, así como los personajes ibicencos que forman parte de su memoria. Su pintura destaca por su sencillez, con perfiladas planas en cuadros en los que el contraste cromático es una constante. Así, el contenido de sus obras huye de la imagen más alocada de Eivissa y se centra en los aspectos más tradicionales de la vida cotidiana.

Impacto
Lo estilizado de los cuadros de Marí hace que éstos transiten por los terrenos que acercan su trabajo a la corriente del ‘pop-art'. Su parte de la muestra está compuesta por trece cuadros, que fueron creados de forma paralela.
«Las payesas, paisajes del casco histórico de Vila o los barcos, son motivos recurrentes en mi obra, ya que me recuerdan a la vida de antaño», asegura Marí.
En términos de técnica, a la pintora ibicenca la cuesta encontrar un estilo en el que clasificar su obra.
El contraste, no sólo cromático sino el que surge a la hora de poner en diálogo un contenido tradicional con técnicas vanguardistas es una de las características que mejor definen el contenido de esta exposición.

Una carrera forjada en Dalt Vila
La pintora, que reside a caballo entre Valencia y Eivissa, presentó su trabajo en la galería Via2 hace tres años. Desde entonces, ha desarrollado su trabajo principalmente fuera de la Isla. El próximo martes, presentará una exposición paralela en el centro de la capital del Turia, en la que también participa Nabil El Hadri.
Natural de Dalt Vila, Dora Marí decidió emprender su carrera artística de forma más estable hace quince años, cuando se apuntó para tomar clases en una escuela de arte y diseño. «La pintura siempre me ha interesado», asegura la artista que espera poder exponer su trabajo de nuevo en la Isla.
l Las obras de la ibicenca representan motivos de una vida tradicional, que contrastan con una técnica colorista que discurre por los terrenos vanguardistas del ‘pop-art'