Esta semana que comienza tendrá lugar en la Isla una nueva edición del Eivissa Jazz Festival y en el mismo, junto con estrellas consagradas como Trilok Gurtu, David Murray o Abe Rábade, otras emergentes como Giulia Valle e instrumentistas de alto nivel como Muriel Grossmann, actuará de nuevo el grupo que ha conquistado este mismo verano el primer premio en el festival de Getxo, honor que ha recaído en el trío del pianista danés Carl Winther.

-¿Qué significó para usted ganar el Festival de Jazz de Getxo?
-Significó mucho para mí y para mi banda ganar el Festival de Jazz de Getxo, primero porque fue un gran honor el simple hecho de ser admitido en la competición porque había bandas de toda Europa. Segundo, fue un enorme reconocimiento obtener el primer premio porque las otras bandas tocaban realmente bien.

-¿Conoce Eivissa y su festival de jazz?
-No he estado nunca en Eivissa con anterioridad, por desgracia, así que tengo muchas ganas de ir porque he oído cosas fantásticas sobre la Isla a través de amigos y familiares. He visto muchas cosas del festival en internet pero no conocía a nadie que hubiera tocado allí.

-En el ámbito europeo, parece ser que la música nórdica es una de las bases jazzísticas del continente, ¿a qué cree que es debido?
-Creo que una de las razones es que hay muchas y muy buenas escuelas de música en Escandinavia y, por ejemplo, en Dinamarca también hay muchas jam sessions y clubs abiertos para los grupos jóvenes y emergentes así como una gran escena musical, pero no sólo para el jazz sino también para el rock y el pop. Supongo que esa es la principal razón.

-¿Cómo definiría el jazz que interpreta? ¿Cuáles considera que son sus influencias?
-Me resulta muy difícil decir qué tipo de jazz toco con mi trío porque supongo que es una mezcla de muchos estilos diferentes, pero creo que definiría mi propia música como 'modern jazz'. Me han influenciado pianistas como Antonio Farao, Brad Mehldau, Keith Jarrett, Bobo Stenson y Kenny Werner. Aparte de todo eso también escucho muchos estilos de música distintos como música clásica, cubana, india, etc.

-¿Por qué una formación de trío?
-He tocado con mi trío de piano durante años y empecé con él porque siempre me ha encantado el sonido que tiene esta formación. Hay mucho espacio para todos porque somos sólo tres en el grupo y hay mucho lugar para la creatividad, algo que se complica a medida que aumenta el número de miembros de una formación. Por último, el trío de jazz es una vieja tradición musical que permite un excelente tejido para el que trabajar y escribir música.

-Parte de la crítica ha querido ver en usted al heredero de Esbjörn Svensson, que también actuó en el festival de Eivissa. ¿Qué opina al respecto?
-Debo decir que me hace muy feliz escuchar eso y es un gran honor que algunos piensen así. He de decir que, a mi modo de ver, son estilos de música totalmente diferentes pero siempre he sido un gran fan de su música, sus composiciones y su trío por lo que le tengo un enorme respeto.

-¿Cree que la actual crisis que viven las discográficas afecta más a un tipo de música como el jazz, que no puede considerarse como superventas? ¿La venta por internet es la salida?
-He de admitir que creo que sí. Para mí sólo hay un camino y es el de seguir trabajando. Creo que internet es una gran ayuda para que tu música llegue a mucha gente y tener la oportunidad de tocar alrededor del mundo.

-¿Como músico, cuál sería su sueño no realizado?
-Mi sueño, supongo que coincide con el de muchos otros, es el de tocar por todo el mundo y conseguir dinero suficiente para sobrevivir.

Cinco años sobre el escenario
El danés Carl Winther (piano) y los suecos Johan Kolsut (batería) y Joel Illerhag (contrabajo) comenzaron a tocar juntos en el año 2006. Fruto de su trabajo, en 2009 lanzaron al mercado Contact, su única grabación hasta el momento. Este pasado verano se impusieron en el Festival de Getxo, lo que les dio el pasaporte para actuar en Eivissa.