MARIANA DÍAZ

Pere A. Serra, presidente del Grup Serra, editor de Ultima Hora, recibió ayer en el Palacio de Festivales de Santander la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en el transcurso de una ceremonia presidida por los Reyes y marcada por la reivindicación del apoyo a la cultura. Pere A. Serra estuvo acompañado por sus familiares y al acto también asistió el conseller de Cultura, Bartomeu Llinàs, quien dijo que «es muy positivo que se entregue esta medalla a una persona de las Illes Balears y, en este caso, es un reconocimiento a la trayectoria de mecenazgo de Pere A. Serra, una persona muy ligada a la cultura y que siempre ha trabajado por ella».

Santander se rindió ayer al «talento y a la humanidad de los premiados», como explicó su alcalde, Íñigo de la Serna, y les recibió con una mañana radiante y hasta calurosa que los habitantes de la ciudad vivieron con expectación, no sólo por la presencia de sus Majestades, sino porque entre los galardonados se encontraba el torero más mediático del momento, Francisco Rivera. Cada año son reconocidas una veintena de personalidades y en esta cuarenta edición hubo un ausente, el escritor burgalés Victoriano Cremer, fallecido en junio.

Discursos

De «pionero en el descubrimiento de las huellas de los soñadores» calificó a Pere A. Serra la ministra de Cultura, Àngeles González-Sinde, en un discurso en el que, echando mano de su faceta de guionista de cine, recurrió a la poesía y las metáforas para destacar las cualidades que, en cada una de sus áreas, hicieron a los premiados merecedores de unas Medallas de Oro que «no son una gratificación, sino una ratificación pública de sus vidas e historia, que nos ha enriquecido», apuntó el alcalde.

Los discursos tomaron un cariz más reivindicativo del papel y la importancia de la cultura con las intervenciones del Rey, de Miguel Bosé y de Miguel Àngel Revilla, presidente de Cantabria. «No escatimemos esfuerzos para favorecer la creación, conservación y difusión de las Bellas Artes, una tarea que sabéis cuenta con el permanente respaldo y aliento de la Corona y que estas medallas promueven», señaló don Juan Carlos en un discurso en el que recordó que estos galardones que concede el Consejo de Ministros, a petición del Ministerio de Cultura, reconocen «la excelencia en muy diferentes disciplinas creativas» y premian «el gran mérito de aquellos que con su mecenazgo, gestión y actividad empresarial favorecen el desarrollo artístico en todas sus manifestaciones».

En nombre de los galardonados habló Miguel Bosé y lo hizo con una apasionada intervención en la que pidió «amparo, protección y leyes y complicidad fiscal hacia el mecenazgo». Moviéndose entre la «rebeldía y la responsabilidad», el cantante aseguró que los artistas «no encontramos hueco» y «estamos al borde la extinción, como los linces ibéricos», por lo que rogó: «No nos dejen huérfanos».