Santi Colomar (primero por la izquierda) ha logrado desvelar mucha información inédita para su libro.

G. ROMANÍ

El historiador formenterense Santi Colomar presenta hoy su último trabajo Formentera a l'època contemporània, 1782-2007 en el que desvela aspectos desconocidos u olvidados de la historia de la Pitiusa Menor. Y para ello, Colomar contaba ayer una primicia que aparece en su libro: «En la década de los 40, el régimen franquista intentó liquidar de nuevo el término municipal de Formentera, pero el ayuntamiento, igualmente franquista, se negó y adujo que se trataba de una isla y era imprescindible que contara con su propio término municipal, lo cual demuestra que incluso en la más cruda posguerra se planteó desde Madrid o de donde fuera, la necesidad de liquidar el término municipal de Formentera y devolverlo a la ciudad de Eivissa, como había sucedido anteriormente, dejándolo en una simple pedanía, pero la oposición de los propios franquistas impidió que ello sucediera».

Colomar explicaba ayer que el libro es fruto de un encargo que le hizo hace un par de años David Ginard, historiador y director de Quaderns d'Història de les Illes Balears, de la editorial Documenta Balear. Ya en su día, Santi Colomar dijo que el trabajo sería largo, primero por sus obligaciones como profesor en el IES Marc Ferrer, así como por las horas que habría de dedicar a la investigación necesaria en los archivos de Eivissa y, en menor medida en Formentera. De ahí Colomar señala que «lo más importante para mí es que tras un largo trabajo, puedo asegurar que aproximadamente la mitad de lo que aparece en el libro es inédito, jamás se había dado a conocer y eso que estaba ahí, en los archivos».

Las actas del XIX

Colomar señaló ayer que hay mucho material que ya ha sido publicado en la Enciclopèdia d'Eivissa i Formentera, pero también hay datos curiosos que han aparecido en los archivos de Formentera en actas del siglo XX. Pero las actas del siglo XIX estaban en Eivissa porque «cuando Formentera recuperó su término municipal en 1888, los archivos relacionadas con Formentera se quedaron en Eivissa por lo que el siglo XIX de Formentera se conserva en allí».

El historiador formenterés indicó que se había consultado la hemeroteca del Arxiu d'Eivissa, que tiene unos fondos documentales muy importantes, u otras fuentes como los documentos de los registros de la propiedad o La Gaceta de Madrid, que es el antecedente de lo que luego sería el Boletín Oficial del Estado.

En el libro, Colomar aporta mucho material respecto a la piscifactoría que montó la familia Wallis en Formentera en s'Estany Pudent, la historia de las almadrabas que tradicionalmente hubo en la Pitiusa Menor y referente a otros aspectos poco conocidos o totalmente perdidos en la memoria colectiva y que ahora aparecen a través de los archivos estudiados.

El hecho de que el título del libro sea Formentera a l'època contemporània, 1782-2007 tiene un doble significado para Colomar: «Los historiadores, y por conveniencias, hacen unas divisiones históricas determinadas y así la época contemporánea se inicia con la Revolución Francesa de 1789, pero como a nivel balear pasó totalmente desapercibida, lo que he hecho es buscar una fecha cercana pero al mismo tiempo significativa y 1782 es la fecha de la creación del obispado de Eivissa y Formentera y el momento en el que ambas islas dejan de pertenecer a la diócesis de Tarragona, los señores feudales desde la época de la conquista por parte de Guillem de Montgrí».

La Ilustración

Además, Santi Colomar destaca que esa fecha coincide con las primeras iniciativas importantes provenientes de la Ilustración con las mejoras o intento de mejoras económicas que introduce el obispo Abad y Lasierra, como fue la apertura de 'sa Sequi' que comunicaba s'Estany Pudent con el mar; la ampliación del Camí de sa Pujada, la única vía de comunicación con el Pilar de la Mola, y el fomento del cultivo de la vid con una gran importación de viñas. Y 2007 es, para Colomar, el otro gran punto de ruptura, el momento en que se cierra el círculo y Formentera obtiene su 'independencia' su propio Consell Insular y deja de ir de la mano de Eivissa.