EFE-BARCELONA

El artista que tuvo su estudio pared con pared con el de Picasso en París y compartió con él amistad y modelo, el fauvista Kees Van Dongen, tiene desde ayer su primera retrospectiva en España en el Museu Picasso de Barcelona.

La muestra trata de desbancar los «tópicos» y «malentendidos» sobre la figura de Van Dongen, aseguró el director del Museu Picasso, Pepe Serra. Si bien fue un artista «de primera línea» estando en París, decayó, a los ojos públicos, al trasladarse a Mónaco y pintar retratos decadentes de la burguesía de la época.

Un total de 78 obras --entre ellas 18 dibujos y un grabado-- del holandés se combinan con piezas documentales y cuatro obras de Picasso en siete salas. Su gran atractivo es que aúna piezas clave y las ordena cronológicamente, de modo que se puede observar la evolución que tuvo el artista a lo largo de su extensa y fructífera carrera.