J. HERRANZ

El centro cultural de Can Ventosa acogerá a las 21,30 horas de hoy sábado la representación de Urtain, el nuevo montaje de la compañía Animalario; dirigido por Andrés Lima, con texto de Juan Cavestany y un reparto encabezado por Roberto Àlamo, que encarna al boxeador vasco José Manuel Ibar, conocido también como el Morrosko de Cestona, que se suicidó en 1992 tirándose de la terraza de un décimo piso.

Roberto Àlamo explicó ayer a este periódico que la principal dificultad para meterse en la piel de Urtain «venía dada sobre todo por ser un personaje real. Lo he trabajado en dos fases: el lado físico, porque José Manuel era levantador de piedras, muy potente en ese sentido; con lo cual desde hace nueve meses estoy yendo dos o tres horas diarias al gimnasio para mantener la forma. Y en cuando al interior del personaje, documentándome con la gente que le conoció, amigos y familia, así como con los vídeos y reportajes que hemos encontrado. Para tener al menos el aroma de cómo funcionaba».

Personaje mediático en la España de los 60 y los 70, Àlamo reconoció que Urtaín fue víctima de los intereses políticos de la época. «Yo subrayaría que, evidentemente, en el franquismo la gran mayoría de este país era víctima. En su caso, acrecentado por una utilización absoluta de su imagen por parte del poder. Se aprovecharon mucho de él y luego le dejaron tirado». Lo que, visto desde hoy, deja una moraleja que se pregunta el autor del texto: «¿Por qué hemos sido educados en la violencia y en el miedo? Y creo que el boxeo es una metáfora perfecta de esto. A mí es un deporte que me gusta, aunque no deja de ser brutal y cruel en muchos casos; aunque es un buen material para razonar», reconoció el actor.

En cuanto a la puesta en escena de Urtain, «es simplemente un ring. Ni más ni menos, lo que encontrará la gente será una velada de boxeo. La gente se sienta alrededor del ring y comienza la pelea emocional de la obra. Es todo».

Estrenada el pasado septiembre en el Teatro Valle Inclán de Madrid, «la respuesta que estamos teniendo está siendo increíble; llenando en todos los sitios a los que hemos ido y con la gente al final aplaudiendo de pie; cosas que yo no esperaba», confesó Roberto Àlamo, añadiendo que por cuestión de fechas Urtain no compite este año por los Premios Max. «Lo haría en la convocatoria de 2010. Pero tampoco me importa, ni me interesa. El premio ya me lo han dado por el lujo que es para un actor la obra en sí, desde luego», aseguró el actor.