J. HERRANZ

La galería Plástika de Eivissa (Juan de Austria, 8) acogerá a las 20,00 horas de mañana viernes la inauguración de una exposición de caricaturas de Raúl Moya (Huesca, 1974), quien desde hace tres años tiene un puesto fijo en el Passeig de ses Fonts de Sant Antoni. «Lo más interesante de trabajar en la calla es el contacto directo con la gente. Te obliga a trabajar de forma directa e intuitiva y se crea una curiosa complicidad entre las dos partes, observador y observado», explicó ayer a este periódico.

La relación de Raúl Moya con Eivissa viene de años atrás. «Conozco la isla desde hace tiempo, pero a trabajar en los veranos empecé en 2003; primero en distintos mercadillos y luego ya sólo en Sant Antoni. Y creo que va para largo, pues me gusta mucho el verano ibicenco», precisó.

Aparte de esta actividad, «durante el resto del año trabajo con un compañero, Fernando Jiménez, en un colectivo de muralistas que se llama Alma Azul, enfocado a la decoración temática en pintura mural. Sobre todo en Valencia, aunque también por Zaragoza y otros sitios. Elaboramos proyectos y los movemos por varios puntos», señaló el polifacético creativo, licenciado en Bellas Artes por la Facultad de San Carlos de Valencia.

Sin olvidar su obra personal. «Ahora estoy trabajando en un proyecto sobre retratos de gente de mi entorno con un concepto diferente al convencional; introduciendo varias secuencias de la misma persona en el cuadro, detalles con primeros planos... y todo muy expresivo y con mucho color; a base de técnica mixta. El objetivo es darle otro enfoque a la idea tradicional del retrato», subrayó Raúl Moya, quien ha colaborado en algún fanzine que otro, así como en revistas de cómic y en otras iniciativas creativas que reclaman su atención.