«Sería una pena grande y un error político grave si muere este festival»Las calles de Vila disfrutan al fin de los sonidos de la 'marching band'

La segunda jornada del Festival Eivissa Jazz 2008 la cerró ayer el concierto de Eivissa Jazz Experience, el proyecto que desde hace varias ediciones dirige Abe Rábade. El pianista y compositor gallego estuvo acompañado por Toni Berenguer (trombón), Perico Sambeat (saxo alto), Jesús Santandreu (saxo tenor), Chris Kase (trompeta), Pablo Martín (contrabajo) e Iago Fernández (batería). «Prácticamente, son todos los músicos que tocan en mi nuevo disco, Open Doors; gente que ha participado en ediciones anteriores de la Mostra del Injuve», apuntó ayer Rábade a este periódico, añadiendo que tocarían cinco temas del disco, todos suyos, «más dos hechos ex-profeso para este festival, que no están grabados y estreno aquí; pues me hace mucha ilusión que cuenten conmigo para dirigir artísticamente este grupo», subrayó.

Además de Open Doors, Abe Rábade ha grabado este año dos discos de encargo: «Uno para la Feria del Libro de La Habana con textos de Rosalía de Castro y la participación de un poeta que canta los poemas; más un disco de canciones de cuna para niños que me pidió el Departamento de Política Lingüística de Galicia; en el que me he encargado incluso de la selección de textos, los arreglos y la búsqueda de vocalistas. Una grabación en la que están Perico Sambeat y mi cuarteto de jazz», explicó.

Preguntado por el rumor (bastante sólido) de que peligra la continuidad del Festival de Jazz de Eivissa, Rábade fue bien explícito: «Sería una pena muy grande y un error político muy grave; porque son ya 20 años de trayectoria con una apuesta distinta a la de los demás festivales de la Península. Músicos nacionales, muchos consagrados, pero una gran parte, la gente que viene representando al Injuve, casos que debutan profesionalmente aquí. Eso es lo que hace falta en España, porque hay una cantera extraordinaria de músicos que se está formando estos años que no tiene este tipo de oportunidades. Y si queremos hacer un país que quiera fomentar la salida profesional de gente joven, son muy necesarias este tipo de iniciativas. Un magnífico escaparate. También por la aportación de gente consagrada del ámbito europeo; e incluso en la propia política de reciclar, que es lo que está potenciando Eivissa Jazz Experience: gente que ya está consagrada y que vuelven al festival en el que debutaron para desarrollar un proyecto específico; algo que abunda muy poco», concluyó el músico gallego.

Tras dos días de aplazamiento y con cambio de grupo, algunas calles del centro de Vila, el Puerto y varias zonas de Dalt Vila pudieron disfrutar por fin ayer de los sonidos de una marching band, tal como estaba programado para esta vigésima edición del Festival de Jazz de Eivissa. Los problemas ocasionados en Nueva Orleans por el ciclón Gustav impidieron la salida de la castigada ciudad de la TBC Brass Band contratada inicialmente. Ausencia que suplieron con entrega e ilusión los miembros de la Josep Siankope & New Orleans Jazz Band, residente en Madrid.