Uno de los cuadros de la exposición que Renata Clary inaugura el martes 15 en Santa Eulària.

JULIO HERRANZ

La sala de exposiciones del Palacio de Congresos de Eivissa, en Santa Eulària, acogerá a las 20,00 horas del próximo martes 15 la inauguración de una exposición de pinturas de Renata Clary titulada Impresiones en piedra y tiza, que estará abierta al público hasta el día 19. «Presento unas 16 obras realizadas al óleo en los dos últimos meses expresamente para esta ocasión», apuntó ayer a este periódico la artista austríaca residente en Eivissa, añadiendo: «Pinto lo que siento, nada más. Me levanto, me pongo a hacer un cuadro y sigo hasta que lo doy por acabado según mi gusto».

Clary pertenece a un familia de artistas. «Vengo de una familia de pintores; mi padre, mi hermano y mi hermana. Yo antes hacía escultura; con la pintura empecé sólo hace cinco años». Y provocado por una anécdota curiosa: «Volvía de Estambul y tuve que esperar ocho horas en Madrid; así que me fui al Prado a ver una gran retrospectiva de Monet que me impresionó mucho, hasta el punto de que me dije que cuando llegara a casa me iba a poner a pintar. Y desde entonces no he parado», relató.

Una decisión que tuvo su dificultad. «Al principio fue duro; estuve probando muchas cosas hasta que encontré mi propio estilo», señaló Renata Clary, satisfecha también por la reacción de sus familiares artistas: «Dicen que les gusta mucho; y entre nosotros no hay competencia ninguna. Ellos me admiran y yo les admiro a ellos».

Renata Clary es hija del reconocido pintor austríaco de estilo realista Robert Knaus. «Conozco Eivissa desde hace 30 años, y he vivido aquí en intervalos; por los hijos más bien. Pero desde hace nueve años estoy aquí fija, en el valle de Morna. También están en la isla mi madre, mi hermana y mi hermano», subrayó.