GUILLERMO ROMANÍ El concierto que dieron el pasado sábado por la noche Aires Formenterencs, Isidor Marí y Miquel Brunet en la Sala Municipal de Cultura de Sant Francesc fue sin lugar a dudas uno de los conciertos del año en Formentera. Por la calidad de los músicos, por las piezas que interpretaron y por un público que no dejó de corear las canciones.

El cine registró un lleno de bandera y mucha gente tuvo que regresar a su casa sin poder entrar en la sala, otros optaron por seguir el concierto desde el hall de la sala o desde el porche aunque no puideron ver a los músicos ya que el llenazo fue absoluto hasta el punto que poco después de las ocho y media no había una butaca libre aunque el concierto debía comenzar a las nueve.

Aires Formenterencs e Isidor Marí intercambiaron piezas musicales con unos preciosistas arreglos a cargo del músico mallorquín Miquel Brunet, que estuvo sobrio pero sumamente eficaz al piano introduciendo elementos de los que no constaban las piezas originales. No faltaron canciones de UC tan emblemáticas como La presó de Nàpols, Anàrem a Sant Miquel o Migjorn mientras que Aires Formenterencs repasaron su discografía con Pàgines enrere, Illa endavant, Flor de baladre o el incombustible Trec-trec que el público subrayó con sus palmas. Si habitualmente Aires hace conciertos que se limitan a una hora de duración, el del sábado por la noche sobrepasó holgadamente la hora y media y fueron precisos cinco bises para que el público se sintiera plenamente recompensado por un cocncierto singular, irrepetible y sumamente bello.

Marí cantó algunas de sus composiciones acompañado únicamente por Brunet y Aires dejó constancia de su excelente momento musical tras un cuarto de siglo de existencia; ahora se plantean la posibilidad de sacar, con motivo de esta efemérides un disco recopilatorio de sus mejores piezas. No queda claro si las gabraciones que se hicieron ayer, tanto de audio como de vídeo, saldrán algún día a la luz, pero en caso de que así fuera, serán un éxito total. Además, la radio municipal de Formentera, Ràdio Illa, retransmitió el concierto en directo para cuantos no pudieron acudir al cine y para aquellos que fuera de la sala oían con dificultad el concierto por culpa de la barrera humana que impedía una buena escucha.