La presencia balear en la reciente Feria Internacional del Libro de Fráncfort ha sido valorada positivamente por los editores que acudieron al encuentro, que en esta edición tenía a la cultura catalana como invitada de honor.

17 empresa de las Islas viajaron a la ciudad alemana con el objetivo de dar a conocer y promocionar sus propuestas editoriales. No todas con el mismo resultado; pero, según las consultas de este periódico, doce de ellas hicieron contactos fructíferos con editoriales de otros países. Es el caso de Sebastià Marí, de la editorial l'Inrevés, la editorial El Gall, la Moll, los libros de la Xarxa Vives (en la que se encuentra la Universitat de les Illes Balears), la editorial Font, o Hiperbòlic, entre otras.

Sin embargo, como ha intuían algunos editores antes de pisar suelo alemán, la presencia de las Islas en la feria podría haber sido mejor. Aún así, las declaraciones de las editoriales invitadas de Balear apuntan a los aspectos positivos. Declaraciones como «ha sido una oportunidad para conectar con el mundo del libro», «un altavoz de propaganda a largo plazo», «un encuentro interesante», no son incompatibles con algunas críticas. Así, algunos empresarios del libro han aludido a un «exagerado programa de actividades y de actos», que deslucía el trabajo de los editores. O -como el caso de Miquel Font, de la editorial Font- afirmar que «éste no será recordado como el año de los editores», haciendo alusión a la falta de protagonismo y de espacio del sector en la feria.