Escena de la obra que Entropia Zero trajo el año pasado al Festival.

JULIO HERRANZ

El grupo catalán Entropia Zero estrenará a las 21,30 horas de mañana sábado en el auditorio de Cas Serres en el IV Festival de Teatre de Eivissa y Formentera Insert Coin, una creación propia en clave de cabaret hilarante con personajes absurdos. Sin embargo, el telón del evento que organiza la Conselleria de Cultura lo levantará en el mismo escenario y a las misma hora de hoy viernes el grupo de Formentera s'Esglai con Tres nits de nuvis de... tres, de Nicasi Camps i Pinós. El primer fin de semana del Festival, que se desarrollará hasta el 1 de mayo, se completa con la representación a las 20,30 horas de este domingo de En Llorenç malcasadís i na Susaina des fi, un romance tradicional de autor desconocido, por el Grup de Teatre Quartó de Portmany.

Será la tercera vez consecutiva que Entropia Zero participa en este encuentro teatral de las Pitiüses con una propuesta en la que los cuatro protagonistas (Carla de Otero, David Regañas, Mónica Serra y Lucila Teste) analizan desde dentro de un vídeo juego la sociedad actual, donde el ser humano busca su propia razón de ser. «Va en torno al mundo de la tele y los vídeo juegos donde cuatro personajes peculiares (una buscadora de ovnis, una tanguera, una china y un presentador de televisión) se encuentran y montan una especie de cabaret», explicó Mónica Serra ayer a este periódico. «Es muy visual, con poco texto, canciones y poesías; y, como en otros espectáculos que hemos hecho últimamente, en la línea de introducir la performance en el mundo del teatro», añadió.

En cuanto a Tres nits de nuvis de... tres, se trata de una comedia en clave de vodevil en tres cuadros «cuya única finalidad es divertir de una manera honesta, aunque parezca un contrasentido. Sí, porque alguna de las historias pueden resultar cínica, amoral y un tanto desvergonzada. Pero en todo momento el autor ha procurado evitar las situaciones de mal gusto, y no es vasta, ni grosera, ni ordinaria. No se dicen palabrotas y todo queda más en el terreno de la insinuación que en el de los hechos», según ha explicado el grupo s'Esglai.