EFE|MADRID

Jennifer López compareció ayer ante la Berlinale comprometida con la causa de los asesinatos masivos de mujeres de Ciudad Juárez, tal como la periodista estadounidense que interpreta en Ciudad del silencio. «Yo no sabía nada del caso, nunca había oído hablar de ello, pero al leer el guión vi que debía hacer algo, aportar mi contribución», explicó la actriz, sentada al lado del español Antonio Banderas, que interpreta un papel secundario en el film de Gregory Nava.

«Uno no puede quedarse cruzado de brazos y volver a la rutina sin más ante este tipo de hechos, había que hablar de ello«, hizo hincapié López, principal protagonista de la película incluida en la sección a competición de la Berlinale y por la cual recibió ayer el premio Artistas por los Derechos Humanos, que concede Amnistía Internacional.

Con un vestido negro con escote trapecio y adornada con un collar de brillantes, Jennifer López acaparó los flashes de los fotógrafos en la presentación del film, mientras Nava se extendía en los asesinatos de mujeres en esa ciudad mexicana fronteriza con EE UU. «Primero hablaban de trescientas, luego de cuatrocientas, de 450, o finalmente sabremos que serán más de 4.000«, explicó el director, para añadir que «todo empezó con la entrada en funcionamiento» del Tratado de Libre Comercio con Norteamérica.