«Me llamo Ana López, soy enfermera y trabajo en el Centro de Salud de San Antoni desde el siglo pasado». Así empieza la profesional Ana López su carta de agradecimiento y despedida de un puesto al que le ha dedicado 28 años de su trayectoria profesional. Un recorrido laboral que continúa, pero lo hará en el Centro de Salud Can Misses, que está mucho más cerca de su casa. Sin ir más lejos, la proximidad al trabajo fue el motivo más importante que llevó a Ana López a participar, hasta tres veces en 18 años, en el concurso de traslados.
«Es muy difícil moverse dentro de la administración, pero, finalmente, en esta última convocatoria he conseguido el traslado», señaló esta enfermera asturiana a Periódico de Ibiza y Formentera, explicando que, pese a ser una decisión muy meditada, echará de menos a sus compañeros y a los pacientes del Centro de Salud de Sant Antoni. Para ellos va dirigida esta carta de agradecimiento: «El viernes 31 de enero fue mi último día de trabajo como enfermera en Sant Antoni y no quisiera irme sin decir adiós, pero, sobre todo, no quisiera marcharme sin decir gracias», señaló en la misiva.
En este sentido, relató cómo llegó a la isla hace 28 años «con el título de enfermera recién salido de la imprenta». «Aterricé en la isla con una gran ilusión y muchas ganas de trabajar, pero enfermera me he hecho en Sant Antoni. Sus gentes me han enseñado a cuidar porque me han cuidado desde el primer día. Todavía recuerdo el hotel donde me alojé durante mi primera semana en la isla y también recuerdo a María, que me daba de desayunar a las siete de la mañana, aunque no estuviera abierto el comedor. Me decía que a trabajar tienes que ir bien desayunada», recordó Ana López en la carta de agradecimiento.
También hizo un recorrido por sus primeros años atendiendo a los pacientes ibicencos, quienes, según esta profesional, le enseñaron a hablar ibicenco con acento portmany. «Aprendí el número de faldones que lleva el traje de pagesa haciendo electrocardiogramas y conocí los rincones perdidos de la isla visitando a pacientes en su domicilio cuando no existía google maps», agregó, mientras agradecía todos estos años a sus compañeros de trabajo.
«Gracias por todo lo que me habéis enseñado y por haberme acompañado este último cuarto de siglo. Ahora toca iniciar una nueva etapa en un nuevo centro de salud con un proyecto que afronto con gran ilusión y compromiso. Espero haber sido una buena enfermera para el municipio de Sant Antoni y haber puesto mi granito de arena para mejorar la salud y el bienestar de mis pacientes. Gracias», así finalizó su carta emotiva de despedida esta profesional que llegó a la isla hace 28 años y ha vivido toda la evolución del sistema sanitario en estos años.
Sin ir más lejos, destacó que cuando empezó en el Centro de Salud de Sant Antoni, el 061 era tan sólo un número de teléfono y «nosotros teníamos que atender las emergencias».
«Hay que poner en valor también el crecimiento de la sanidad pitiusa con recursos como la radioterapia, ya que antes tenías que desplazarte fuera de la isla. Muchos son los servicios que han ido mejorando para bien del sistema sanitario», apuntó, remarcando la etapa tan difícil que supuso para los sanitarios y la población la crisis sanitaria.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.