Pintura contra el exceso de cemento

El arquitecto y pintor Cis Lenaerts denuncia con una exposición en Ca Llaneres la construcción a la que está siendo sometida la isla y el impacto que puede tener no sólo estética sino también medioambientalmente. A través de 36 cuadros elaborados conforme a las premisas de lo que él define como«simbolismo lírico», Lenaerts propone una forma distinta de enfocar las cosas para advertir de ciertos excesos que se están cometiendo a la hora de adoptar soluciones arquitectónicas: «Hay propuestas técnicas que no me parecen malas, pero a veces sí son excesivas en su planteamiento», explica el autor. En alguno de sus cuadros muestra un urbanismo desordenado y excesivo, «algo que se está comiendo nuestra isla», asegura. Una raya blanca marca el límite simbólico de lo que todavía es virgen y lo que no en Eivissa.

«No me suelo meter directamente en ciertos temas, pero esta vez si que pensaba que era un buen momento para decir 'cuidado con lo que estáis haciendo', porque creo que la isla tiene una escala y si se hacen autopistas como las que se hacen en Madrid, por ejemplo, hay algo que no cuadra», explica. Lenaerts cree que hay muchas formas de resolver el problema del tráfico y que sería deseable hacer algo más acorde con las dimensiones del territorio. Aunque asegura que no pretende hacer un panfleto, reconoce que al menos por una vez ha querido llamar un poco la atención: «El objetivo no es otro que conseguir el triunfo de la naturaleza que aún tenemos», concluye.

Es la segunda vez que este artista expone en Can Llaneres, sede de la demarcación pitiusa del Colegio Oficial de Arquitectos de Baleares. La anterior ocasión fue en 1999, con motivo de una muestra preparada junto al escritor Jean Serra, y en la que ilustraba con sus pinturas alguno de los textos del poeta.

Lenaerts se muestra satisfecho de volver a estas instalaciones, donde sus creaciones estarán a la vista del público durante un mes, y espera cosechar buenas críticas de sus colegas arquitectos, aunque a día de ayer reconocía que la mayoría de ellos todavía no habían tenido ocasión de contemplarla.