El grupo municipal progresista del Ayuntamiento de Sant Josep lamentó ayer que se realicen inversiones que considera que «no son prioritarias» como es el caso de la sustitución del suelo de la iglesia de Sant Josep, que promueve la Conselleria insular de Patrimonio. El Pacte recuerda que en este proyecto «no hay acuerdo ni dentro del pueblo de Sant Josep ni dentro de la propia comisión de Patrimonio». Asimismo, señaló en un comunicado que esta actuación es «muy cara» y sugirió que el dinero destinado a este fin «se podría dirigir a otras cosas». A pesar de estas afirmaciones, el Pacte dejó claro que «considera que las iglesias son elementos patrimoniales de primer orden y que las instituciones públicas deben hacer esfuerzos para su mantenimiento por lo que suponen de riqueza cultural y tradicional para nuestro pueblo, así como para nuestros visitantes». También recalcó que «las inversiones se deberían priorizar de acuerdo con aquello que fuese en cada momento necesario» y subrayó que sí que considera prioritarias las obras «en el caso de la casa parroquial de Sant Josep».

Por otra parte, el grupo municipal progresista criticó que ni el Consell Insular ni el Ayuntamiento de Sant Josep «hayan comenzado nunca los planes especiales de protección de las iglesias que manda hacer la Ley de Patrimonio de 1998» y señaló que «eso sí que es una prioridad cuando se están levantando edificios continuamente que dañan los conjuntos históricos del municipio. Asimismo, los progresistas argumentaron que ni el Consistorio ni el Consell se preocupan demasiado de la protección de otros elementos patrimoniales «como son las paredes de piedra seca que hay en todos los terrenos rústicos del municipio». Además, recuerdan que es el Consistorio que las deshace «sin miramientos».