Charlie Watts, batería de los Rolling Stones, padece cáncer de garganta y está siendo sometido a radioterapia en un hospital de Londres, según informó ayer un portavoz del grupo británico de rock. El portavoz de los Rolling dijo que el cáncer le fue diagnosticado en junio pasado, durante una operación médica menor, y que ya ha sido tratado del tumor mediante un ciclo de sesiones de radioterapia en el Royal Marsden Hospital de Chelsea.

Watts, de 63 años, se ha sometido durante cuatro semanas a radioterapia y le quedan otras dos semanas de tratamiento, según el portavoz. El batería de los Rolling se reincorporará a la banda a finales de año porque las perspectivas de recuperación son optimistas, según la fuente. «Piensa recuperarse totalmente y empezar a trabajar con el resto del grupo a más tardar a final de año», señaló el portavoz, que recalcó que Watts está acompañado en este trance por su esposa, Shirley, y que los demás miembros de los Rolling ya han sido informados de la enfermedad.

Añadió que el batería «está en buena forma», y, como ejemplo, relató que el músico acude a pie desde su residencia al hospital de Chelsea, al oeste de Londres, donde está siendo tratado. Charlie Watts fue fumador en su juventud pero dejó el tabaco en los años 60. La enfermedad de Watts obligará a los Rolling Stones a suspender sus conciertos y grabaciones hasta la completa recuperación de su batería, aunque en estos momentos no tenían prevista ninguna actividad, según el portavoz.