La galería Es Molí de la carretera de Santa Gertrudis (no
confundir con la del mismo nombre de Sant Rafel) presenta desde
ayer una exposición de esculturas de Lorenzo Quinn. Una cita que ya
se está volviendo costumbre en la veterana galería, donde el hijo
del actor Anthony Quinn ya ha presentado sus trabajos en varias
ocasiones.
Esta vez son alrededor de una treintena de esculturas de
distintos tamaños las que conforman la muestra; trabajos repartidos
sobre todo por el jardín de la galería, muchos de ellos de carácter
simbólico dentro de una línea figurativa que entronca con los
grandes clásicos del principio del siglo XX; sobre todo con
Rodin.
Lorenzo Quinn no estuvo presente ayer en la inauguración por
compromisos previos, aunque vendrá a verla a principios del próximo
mes de agosto. La dirección de la galería Es Molí organizará para
entonces un vernissage para brindar por la obra del artista.
Lorenzo Quinn (Roma, 1966) estudió Arte en Nueva York, ampliando
su formación en talleres y fundiciones de Estados Unidos y de
Europa. Según ha confesado en alguna ocasión, sus grandes
referencias artísticas son Miguel Àngel, Bernini, Carpaus y
Rodin.
Se inició como pintor en 1982, pero pronto descubrió que en sus
trabajos faltaba una dimensión, por lo que pasó a la escultura por
una necesidad creativa para transmitir sus sentimientos. «Es el
espectador el que me interesa, y no el crítico de arte. Esculpo
para aquellas personas que desean dar un paseo por mis sueños», ha
dicho Quinn sobre su intención a la hora de crear. Según ha
confesado, su inspiración procede de las experiencias cotidianas de
la vida, así como de la poesía y la literatura en general; pero,
sobre todo, en observar la energía vital.
Lorenzo Quinn, que actualmente reside en Barcelona, ha
presentado su obra por un buen número de países.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.