En poco más de dos meses, la colección privada de Carmen
Thyssen-Bornemisza quedará instalada en los nuevos espacios del
Museo, y la sala dedicada a exposiciones temporales se inaugurará
con la muestra «La pintura catalana del Naturalismo al
Novecentismo», con obras pertenecientes a la colección de la
baronesa y viuda del coleccionista alemán que da nombre al museo
madrileño.
El secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca, y la
baronesa Thyssen-Bornemisza visitaron ayer las obras de ampliación
del museo, cuyo presupuesto es de 36 millones de euros, durante un
recorrido en el que estuvieron acompañados, entre otros, por Tomás
Llorens, conservador jefe del museo, y el arquitecto Francesc
Pla.
Las dieciocho nuevas salas situadas en el edificio anexo al
Palacio de Villahermosa, que suponen más de dos mil metros
cuadrados de espacio expositivo, repiten los mismos parámetros y
tipos que las del palacio ya que uno de los objetivos del proyecto
arquitectónico, diseñado por Manuel Baquero y Francesc Pla, ha sido
conseguir una continuidad interior entre ambos espacios, que
contrastan con la modernidad exterior del nuevo edificio. Todo ello
ha dado como resultado un conjunto unitario, que hace posible una
sucesión sin rupturas tanto en la circulación de los visitantes
como en la integración de la nueva colección con la ya
existente.
Al nuevo espacio expositivo hay que sumar otros seis mil metros
cuadrados destinados a la adecuación y mejora del museo. Durante el
recorrido, la baronesa mostró su satisfacción y dijo sentirse «muy
feliz» por ver «en la recta final este sueño» con un resultado de
gran calidad. «Espero el día de la apertura para poder gozar de la
colección permanente» así como de las exposiciones temporales,
señaló la baronesa, Tita Cervera de soltera.
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