Primeras autoridades, ayer en la presentaciónFotos: MARCO TORRES

El presidente del Consell, Pere Palau; el conseller de Patrimoni, Joan Marí Tur; la directora general de Cultura del Govern, Catalina Sureda, y el alcalde de Sant Antoni, José Sala, inauguraron a la restauración de la cueva de ses Fontanelles, con un presupuesto de 1,4 millones de euros.

La cueva está situada en una pared rocosa a 50 metros sobre el nivel del mar en la costa norte de Sant Antoni. Las pinturas de sus paredes fueron descubiertas en 1917 por el abad Henri Breuil y «son únicas en toda Baleares», según el informe de los restauradores, el grupo de investigación, conservación y divulgación del Patrimonio y la Cultura «Poseidonia», que definen el contenido de la cueva como «pinturas monocromas, en color negro, que representan trazos y figuras difícilmente identificables», no han logrado situar cronológicamente estos trazos, que para Breuil databan de la Edad de Bronce y representan barco, mientras que otros autores los consideran de época púnica.

La restauración ha afectado a dos conjuntos distintos, uno situado en la pared norte a 1,30 metros de altura y con una superficie de dos metros cuadrados y otro ubicado en el techo de la cueva y que cubre una longitud de 70 centímetros. Los dos habían sido objeto de actos de vandalismo y mostraban restos de pinturas plásticas, escritos con carboncillos y marcas de palmas de manos. Tras la restauración, la cueva ha sido cerrada con rejas y acondicionada para facilitar la visita de los turistas y residentes interesados.