Antoni Cardona, responsable de Edicions Can Sifre, no podía disimular ayer su satisfacción por el producto que tenía entre manos: una obra de teatro inédita de Marià Villangómez, editada con gusto y bellamente ilustrada por Kika Sánchez. «Mucha gente ignoraba que tuviera obras de teatro por publicar; nosotros la teníamos hace ya varios años, y aún nos quedan tres más inéditas que aún no sabemos cuando sacaremos, pero no creo que se tarde mucho», explicó con cierto orgullo a Ultima Hora Ibiza y Formentera el editor y escritor ibicenco.

El privilegio de que Cardona tenga en su poder este material literario inédito del principal escritor ibicenco tiene su razón de ser: Villangómez estaba muy satisfecho con el trabajo editorial que Toni Cardona había realizado con otras dos obras de teatro del poeta: «Ses germanes captives», que mereció un Premi Cavall Verd de Teatre a la edición, y el «Somni d'una nit d'estiu». Así, era lógico que el resto de su obra teatral fuera a parar a sus manos. «En su testamento hace una recomendación al Institut d'Estudis Eivissenc (albacea y heredero de los derechos de autor de su obra) para que llegue a un acuerdo con Can Sifre para la publicación de esas cuatro obras», aclaró.

Aparte de la sorpresa por la aparición de una obra inédita de Villangómez, hay una segunda no menos interesante: que sea una comedia divertida alrededor de una historia de amor, dos conceptos que abundan más bien poco en los trabajos literarios del autor de «L'any en estampes». Escrita en 1957, «L'anell és més que un joc» es un texto ambientado en Eivissa en una época indeterminada. «Podríamos decir que es de carácter local, pero de alcance universal. Una historia que tiene mucho de teatro clásico; es muy divertida, no es de enredo, aunque esté un poco enredada... En definitiva, se trata de una historia de amor en clave de comedia que acaba en un doble emparejamiento con sorpresa», aseguró Cardona. «Es muy fácil de representar para los actores y llegaría muy bien al espectador», añadió.

De momento, claro, el editor no tiene ninguna propuesta de representación, «aunque supongo que no faltarán en cuanto comience a conocerse. El que tendrá la última palabra al respecto será el Institut. Me gustaría que así fuese, que es lo que quería su autor», comentó el responsable de la edición, quien cree que la producción teatral de Villangómez llegará a ser tan valorada como su poesía; obras en los que nunca falta algún intercalado lírico y cuya misma prosa tiene a veces un marcado ritmo poético. «Al principio él no valoraba su teatro, se lo tomaba como un divertimento. Fue gracias a la opinión de los amigos que empezó a tomárselo más en serio», afirmó Cardona.