En cumplimiento de lo ordenado por la Comisión de Patrimonio, el futuro edificio del Conservatori de Eivissa tendrá que ser modificado en su proyecto inicial a fin de salvaguardar los restos arqueológicos encontrados en el solar de la vieja escuela de Artes y Oficios, donde se ubicará. Con tal motivo, el autor del proyecto, el arquitecto Alfredo Payá, visitará próximamente la isla para conocer la nueva circunstancia y obrar en consecuencia, modificándolo en lo que sea necesario.

El conseller de Patrimoni, Joan Marí Tur, se entrevistó ayer en Palma con el conseller de Educació, Francesc Fiol, para tratar de agilizar en lo posible los trámites que solicitó la Comisión de Patrimonio. «Me he entrevistado esta mañana (por ayer) con él y hemos quedado en que el arquitecto autor del proyecto se pondrá en contacto con nosotros y hará una visita a Eivissa. También vendrá el conseller, y entonces tomaremos las medidas que debamos tomar para cumplir el mandato de la Comisión de Patrimonio y adaptar el edificio a la nueva realidad arqueológica», explicó Joan Marí Tur.

El proyecto de Alfredo Payá (Alicante, 1961) resultó el ganador de un concurso en el que se presentaron 30 trabajos «por su gran nivel técnico y cualitativo», según el jurado. El edificio proyectado tendría seis plantas y capacidad máxima para 240 alumnos. Tendría tres espacios diferenciados, la escuela de música, la de danza y un tercero que albergará los espacios comunes: biblioteca, sala polivalente y un auditorio de 150 plazas. «El interior será como un gran jardín, por su luminosidad, vegetación y puentes», precisó Payá el pasado enero.