La guerra ha hecho acto de presencia en la sección competitiva del Festival de Venecia gracias a un filme polaco y otro libanés, mientras, también en concurso, se vio un sólido largometraje italiano sobre la creencia popular en los milagros. Hollywood, por su parte, presentó «The human stain», protagonizada por Anthony Hopkins y Nicole Kidman. Dirigida por Robert Benton, es un ataque a la hipocresía en Estados Unidos y a la filosofía de lo «políticamente correcto».

El polaco Jan Jakub Kolski firma «Pornografia» que cuenta la historia de una localidad de su país en 1943, durante la ocupación nazi, y las relaciones que, en ese contexto agobiante, se desarrollan entre los habitantes. La violencia, no sólo física, es el eje central de la historia y gobierna la vida de esa comunidad.

En la sección competitiva que premia con el León de Oro se ha presentado también «Il miracolo», del italiano Edoardo Winspeare, que construye un retrato de las esperanzas y frustraciones que se generan en torno a algunos acontecimientos que carecen de explicación lógica. En la película, un niño de doce años es atropellado por una joven que huye y, tras recuperarse en el hospital, tiene una participación en la inesperada curación de un moribundo.

«The human stain», fuera de concurso, fue presentada por Benton y Hopkins, con la ausencia de Kidman. Inspirada en una novela de Philippe Roth, «The human stain» cuenta la historia de un brillante profesor universitario (Hopkins), de religión hebrea, que cae en desgracia cuando trasciende un comentario puntual que se puede entender como racista. Acto seguido, contra él se desata una caza de brujas.