Instantes antes de empezar, Carme Ferrer, de nueve años, parece
nerviosa. Por primera vez ha acudido a la Fundació Pilar i Joan
Miró a realizar un taller, en esta ocasión llamado «Acordió» y que,
desde ayer y durante todos los sábados del mes de junio, se
impartirá en el centro. Horacio Sapere es el conductor del
mismo.
«Me gusta mucho pintar porque puedo cambiar los colores y las
formas», asegura Carme. Para ella, Miró fue «un escultor y un
pintor muy famoso». Por ello, afirma que se divertirá mucho jugando
a ser Miró. «A partir de tres cuadros del artista que parecen
inacabados, casi bocetos, jugaremos con sus elementos básicos, es
decir, el punto, la línea y el plano, para hacer una nueva obra»,
explicó Horacio Sapere.
Carme observó, durante un rato, las tres obras de Miró en el
Espai Estrella. Allí, Sapere les hizo cerrar los ojos para que se
imaginaran los colores. Así lo hizo Carme, igual que Jonathan
Delgado, de cinco años. «Es la segunda vez que vengo, la anterior
hice un círculo de esparto para colgar en el techo».
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