El doctor en Filología catalana y director del Servei Lingüístic de
la Universitat de les Illes Balears (UIB) Gabriel Bibiloni fue ayer
el encargado de la última conferencia del XXVI Curs Eivissenc de
Cultura, que durante toda la semana se ha desarrollado en la Sala
de Cultura de «Sa Nostra». El tema elegido para clausurar el ciclo
organizado por el Institut d'Estudis Eivissenc (IEE) fue «La
llengua catalana: balanç i perspectives». La excursión a la bahía
de Sant Antoni prevista para hoy ha sido desconvocada por no
haberse alcanzado un número mínimo de participantes.
En su exposición, Gabriel Bibiloni hizo un análisis de la
política lingüística de Balears desde 1983 hasta 1999; a
continuación, se centró en el año y medio del gobierno del Pacte,
«cuando se han dado pasos hacia adelante»; siguió con un análisis
de la situación global del catalán y de los principales elementos
de esta situación, «como por ejemplo la inmigración, o de
obstáculos como la actitud de los tribunales de justicia», apuntó;
para terminar formulando un proyecto de normalización, mirando las
principales dificultades para llevarlo adelante.
La idea central del proyecto de Bibiloni es «que el catalán sea
una lengua común en todos los usos lingüísticos de las Islas; que
todo el mundo la conozca y la hable como idioma de
intercomunicación entre grupos sociales», señaló. Mostrándose
«realista» ante la situación actual del catalán, el ponente aseguró
que «hay muchas dificultades para llevar adelante el proyecto;
imputables a veces a elementos exteriores y otras, indudablemente,
a interiores», precisó.
En cualquier caso, Bibiloni se mostró taxativo: «Tiene que haber
una acción institucional que lleve la iniciativa, el impulso hacia
la normalización; pero es evidente que si la sociedad no responde a
este impulso institucional, el proyecto no funcionará y el catalán
no se salvará».
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