El compositor madrileño Rafael Cavestany, residente en Eivissa desde 1995, tiene en su abultada cartera de proyectos la composición de una sinfonía sobre el Apocalipsis de San Juan en la que está metido de lleno desde hace unos meses.

El encargo partió de Agustí Aguiló, de la Fundació Àrea de Creació Acústica (ACA); se llamará «Sinfonía del Apocalipsis», tendrá seis movimientos y un epílogo (como la obra en la que se inspira) y será estrenada por la Orquestra Simfònica de Balears, más un coro y barítono, probablemente en el «Encontre Internacional de Compositors» de Palma del próximo año, aunque este extremo no se ha concretado aún. «Es una obra inmensa, que probablemente se alargue más de una hora». «Ya hay mucha gente al tanto de ella; el barítono menorquín Joan Pons, entre otros.

Está muy interesado y me ha pedido que le vaya mandando la música por si encuentra un hueco para hacerla, aunque tendrá un año muy liado», explicó a este periódico el activo compositor. Otra posibilidad que se está estudiando es la participación del coro de la Capilla Davídica de Menorca. Una de las particularidades de esta sinfonía es la lengua en la que estará cantada, el arameo. «Es una de las condiciones que puse, que los textos fueran en el arameo medio, que es el que hablaba Jesús. Un profesor de Madrid, Francisco Río, me ha traducido a este idioma las citas escogidas».