El alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, mostró ayer su tranquilidad
respecto a la polémica surgida en torno al Grupo de Ciudades
Patrimonio, por la demanda de otras seis ciudades para entrar en
esta prestigiosa asociación en la que Eivissa ha solicitado
formalmente su incorporación. «No estamos preocupados en ese
sentido; si somos aceptados, muy bien, porque lo solicitamos y nos
interesa, pero si no nos admiten en la reunión que habrá el día 9
en Madrid, estoy seguro de que en algún momento acabarán
pidiéndonos que entremos», apuntó el primer edil ayer.
Según José María Saponi, alcalde de Cáceres y actual presidente
del Grupo de Ciudades Patrimonio, la solicitud de Eivissa es de
conformidad con los estatutos actuales; lo que no sucede en el caso
de Granada, Tarragona, Alcalá de Henares y la Laguna. La diferencia
es que los estatutos actuales sólo admiten en el Grupo a Ciudades
Patrimonio y no a conjuntos o monumentos específicos. Por ese
motivo, en la reunión del día 9 en Madrid se discutirá si se
amplían los estatutos a otros presupuestos de los actuales; algo
que, en principio, rechaza José María Saponi.
Las ventajas que representaría para Eivissa ingresar en dicho
Grupo es «que se hace más presión a la hora de pedir cosas estando
en esta asociación que hacerlo por separado; aparte del prestigio
que significa para las ciudades miembros, que acuden juntas a las
distintas ferias de turismo», explicó Tarrés.
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