La presidenta de Congreso, Francina Armengol, a su llegada a una reunión de la Junta de Portavoces. | Europa Press - Marta Fernández Jara

La presidenta del Congreso, la socialista Francina Armengol, ha afirmado este martes que, cuando presidía el Gobierno balear, no recibió «órdenes» ni «presiones» de la trama Koldo para comprar mascarillas ni para no reclamar la devolución de parte del material, aunque no ha aclarado quién del Ministerio de Fomento les aconsejó contratar esa empresa.

En todo caso, ha defendido su gestión y su buen nombre deplorando toda corrupción, y ha avisado al PP de que «no todo vale en política» y que debe explicar qué ha pasado con esa reclamación que su Govern formalizó en julio de 2023.

En una comparecencia en la Cámara Baja, Armengol ha señalado que en esos primeros meses de pandemia su gobierno recibía muchos nombres de empresas de distintas personas recomendando con quién contratar y que todo eso se enviaba a los técnicos del Servicio Balear de Salud (IBSalut) para que revisaran precios y materiales y decidieran si contrataban o no.

Se le ha preguntado en varias ocasiones quién del Ministerio de Fomento les comentó el nombre de la Soluciones de Gestión, la empresa de la trama, si fue el entonces ministro José Luis Ábalos o su asesor, Koldo García Izaguirre, uno de los detenidos, pero no ha precisado.

LOS TÉCNICOS GESTIONABAN LAS RECOMENDACIONES Y DECIDÍAN

«En ese momento necesitábamos todas las administraciones públicas comprar material sanitario y nos llegaban propuestas a todos de diferentes empresas, de diferentes personas, pero obviamente pensando que todo el mundo lo que quería era ayudar --ha dicho--. Nos llegaban de diferentes sitios, de empresarios, de gente que tenía un contacto que pensaba que alguien podía intermediar en China para poder comprar material sanitario, de administraciones, de ministerios, de instituciones, de ayuntamientos».

Pero ha querido dejar claro que, en todos sus años al frente del Consell de Mallorca y del Govern balear, nunca dio órdenes para contratar con una empresa o con otra. En pandemia, ha añadido, esas recomendaciones se pasaban a los técnicos del IBSalut, que eran quienes decidían técnicamente si se tenía que comprar o no ese material sanitario, si era efectivo o no y si se necesitaba o no.

Pero además, ha remarcado que ni a ella ni a su Govern se les dio orden alguna, ni se les presionó para contratar con esa empresas, ni se fueron coaccionados para retirar la reclamación que presentaron contra la empresa.

Subraya que ni ella ni sus consellers están citados en el sumario del caso Koldo y que no se les puede implicar en la trama cuando ellos compraron lealmente a decisión de los técnicos, firmaron un contrato de 3,7 millones que fue avalado por Intervención General y que además presentaron en tiempo y forma una reclamaron a la empresa por parte del dinero porque el material recibido no contaba con la protección antivirus que habían contratado. Mi Gobierno podría ser victima, pero jamás cómplice ni colaborador", ha enfatizado.

LA INVESTIGACIÓN EUROPEA SE ARCHIVARÁ COMO LA DEL HERMANO DE AYUSO

En cuanto a la apertura de una investigación por parte de la Fiscalía Europea, fuentes del Govern Armengol señalan que es un procedimiento habitual ante una denuncia anónima, pero recuerdan que también se hizo en el caso de las mascarillas del hermano de Isabel Díaz Ayuso y se archivó, que es lo que están convencidos de que ocurrirá también en este caso.

Según ha explicado Armengol, una de las cosas por las que entró en política fue por luchar contra la corrupción, que es algo que le «repugna» y que detesta «profundamente». De hecho, ha enfatizado que si en esos meses de pandemia «alguien se lucró, que le caiga todo el peso de la ley encima».

«Por eso, no dejaré que mancillen mi nombre y no dejaré que mezclen mi nombre y mi gestión a nada que se parezca a la corrupción», ha enfatizado, acusando al PP de haber roto «todas las fronteras y las líneas rojas» por señalarla como miembro de la trama.

Como presidenta del Congreso, asegura que quería preservar la institución, que es «la cuna de la democracia por excelencia», y no implicar a la tercera autoridad del Estado en luchas partidistas, pero ha decidido salir al paso de las acusaciones del PP porque entiende que «la ciudadanía no sé merece según qué espectáculo y qué iniciativas».

«Tengo que comparecer para explicar que en política no todo vale y que todos los políticos no son iguales --ha afirmado--. La política no es embarrarlo todo, hay que decir la verdad. Pido responsabilidad al PP, que esté a la altura de las circunstancias».

Y en ese sentido, ha pedido saber qué ha pasado con la reclamación que su Govern presentó en julio y comunicó al Ejecutivo 'popular' de Marga Prohens. «Debe explicar claramente que ha hecho con ese expediente de reclamación», ha retado.

Preguntada si en algún momento se ha planteado dimitir, como le exigen desde el PP, ha señalado que resultado «como mínimo sorprendente» que quien le pida dejar el Congreso sea precisamente «el único que sale en el sumario», en referencia al portavoz del Grupo Popular, Miguel Tellado.