Xavi González, enseña sus heridas tras sufrir un grave accidente con su motocicleta. | ALEX SEPULVEDA

Xavier González vio la vida pasar por delante de sus ojos el pasado 16 de noviembre en la carretera de Palmanyola. El joven de 24 años, salió disparado por los aires después de esquivar una furgoneta que «se saltó un ceda al paso y después se dio a la fuga mientras quedé inconsciente en el suelo de la rotonda» y le rompió cinco vertebras.

Corrían las 17:45 horas de aquel jueves cuando el miedo invadió su cuerpo al ver como «el vehículo venía directo hacia mi. Cuando intenté agarrar la moto con fuerza, perdí la noción de todo, tuve visión negra y me desperté en el hospital. Era una tarde cualquiera. Volvía del gimnasio y me llevé el susto de mi vida». En el mismo lugar del suceso, diversos testigos ayudaron al joven y llamaron a una ambulancia que acudió rápidamente justo delante de Son Amar para acompañarlo a Urgencias de Son Espases. «Pido ayuda para encontrar al conductor que me dejó tirado a punto de morir», señala el joven.

La víctima tuvo que pasar cuatro días en el Hospital Universitario para controlar su situación crítica. «Tengo roto el cúbito, la clavícula, fracturadas cinco vertebras, contusiones pulmonares y la escápula también». Ante esta situación, sin embargo «estoy tranquilo porque sé que encima de la moto lo   hice bien y que no tengo culpa de nada», pero asume que «son momentos difíciles pero lo intento llevar de la mejor manera posible». A pesar de que el dolor no desaparece, intenta ofrecer su mejor cara para poder superar estos momentos tan complicados. «Tengo bastante dolor en el tórax. El pulmón es lo que me duele más, además de la clavícula, pero qué le vamos a hacer. Creo que lo más importante es afrontar estos casos con optimismo», insistió Xavi visiblemente emocionado recordando el traumático suceso. «He tenido bastante suerte, porque hubiese podido ser muchísimo peor», asumió con una sonrisa en la cara.

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Desde el mismo momento del accidente, toda la familia está trabajando incansablemente para encontrar al conductor que no se paró y dejó a Xavi inconsciente en la carretera. «Sabemos que es una furgoneta con la serigrafia roja y que seguramente trabajaba en el polígono», expone su madre, Susana Bonnín.

«Pido ayuda para encontrar al conductor que me dejó tirado a punto de morir»
Xavi junto a su madre, mostrando el llamamiento ciudadano que han realizado.

Ante este contexto que le ha tocado vivir, Xavi se ha refugiado en su familia y sus amigos. «Por suerte, tengo un entorno increíble que me está mostrando su cariño estos días». La madre y sus hermanas se han convertido en un pilar fundamental tras este suceso    y están «buscando al conductor».

Exigen justicia

Toda la familia ha pedido a través de sus redes sociales que les ayuden para localizar al conductor que se dio a la fuga. La madre del perjudicado, Sandra Bonnín publicó un cartel con el que pedía ayuda. El vehículo que atropelló al joven pertenece a alguna empresa de construcción, «a algún tipo de trabajo técnico o de obras». En el escrito, la progenitora explica lo sucedido concretando el punto exacto del impacto.    La furgoneta, salía de Palmanyola y se incorporó a la vía saltándose una línea continua en la salida situada frente a la empresa Materiales de Construcción Oliver Morell.

Susana, que desde el mismo día del accidente no ha podido dormir tranquila, no va a parar hasta que se haga justicia. «No es justo que mi hijo esté en esta situación y el causante que se saltó una señal de tráfico y casi se lleva la vida de alguien por delante siga por la calle sin ninguna reprimenda», comentó la mujer, que emocionada, enseñaba el escrito que escribió para llegar a más personas.