Desde la Asociación, su directora general, Sandra Verger explica que el Govern «ha entendido nuestra problemática y se ha puesto a nuestra disposición. De hecho, advierte de que si no se incorpora un sistema de revisión de precios «se va a incrementar el número de obras que quedarán desiertas, con el perjuicio que ello supone para la comunidad». De hecho, «algunas empresas ya se están planteando abandonar los contratos porque no pueden hacer frente a los sobrecostes». Los constructores están lidiando con un doble frente de crisis desatado solo en parte por la guerra en Ucrania. Por un lado el encarecimiento de los materiales, que ya viene arrastrándose desde los últimos meses debido a la crisis de suministros; por el otro, la situación geopolítica actual ha desembocado en un nueva escalada de precios y en la dificultad logística para la llegada de los propios materiales como consecuencia de los parones de los transportistas.
De hecho, algunas empresas de materiales de construcción como Grupo Puma o Paviments Lloseta, afiliadas a PIMEM, ya han anunciado su cierre temporal por la imposibilidad de compatibilizar su operatividad con la falta de material. Desde la asociación que preside Fanny Alba se insiste en que el incremento desorbitado de los precios y la huelga del transporte provoca un serio riesgo de paralización generalizado de obras.
En ese sentido, Verger subrayaba que las medidas compensatorias que ya venían reclamando antes de que estallara la guerra están muy ligadas a los sobrecostes inducidos por la insularidad. Asimismo, la asociación ha solicitado que la comunidad balear adapte -y si es posible mejore- el decreto-ley estatal de revisión de los precios del pasado 2 de marzo. Las empresas baleares consideran que el texto no contempla la realidad del sector en las Islas, ya que excluye muchos materiales que las constructoras se ven obligadas a traer desde la península. Además, el decreto-ley basa gran parte de sus consideraciones en las grandes infraestructuras, una tipología de obra que no es la habitual en Balears.
Alba y Verger, al igual que el vicepresidente de la asociación, Climent Olives, han sido recibidos este lunes en el Consulat de Mar por la presidenta del Govern, Francina Armengol, y el conseller de Mobilitat i Habitatge, Josep Marí. La presidenta sigue así la ronda de contactos iniciada la semana pasada con los sectores afectados por la crisis.
6 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Para ganar los concursos públicos tirando los precios por los suelos y después a primeras se quejan. No olvidemos que se llevan el concurso porque han puesto un precio más bajo que el resto de licitantes, no seria justo después pagarles más. Que le den la obra al siguiente de la lista y pierdan lo gastado.
Tendrian wue parar para siempre esta ya semadiado construido
Eso pasa por escuchar a las constructoras, quien se las cree?, ¿que os pensabais que son una especie de Cruz Roja que ayuda a ka gente y ofrece trabajo?, son como los hoteleros, siempre llorando, siempre llorando pero si por ellos pudiesen tirarían abajo la Catedral y harían alli unos macroedificios de 30 pisos. Esto es así, se les hizó mucho caso y ahí siguen, llorando
Hem crescut massa i ara ja no podem seguir amb el mateix model. Hauríem d'haver apostat per l'autosuficiencia i no per la hiperdependència
Mejor.