La presidenta Francina Armengol ha explicado este lunes, tras la Conferencia de Presidentes, que «este Govern no se ha cerrado nunca», en referencia a las peticiones por parte de sus adversarios políticos y del sector de la restauración de retrasar el inicio del toque de queda hasta la medianoche en Baleares. Sin embargo, la líder del ejecutivo balear ha recalcado que la prioridad pasa en estos momentos por controlar la pandemia en las Islas, corroborando que «las cosas no van bien», a la vista de los últimos datos y del empeoramiento de las tasas de afectación en los últimos diez días. Ante los periodistas la presidenta del Govern ha reiterado, en relación a las peticiones para flexibilizar el inicio de las restricciones nocturnas de movilidad, que «hemos convocado una reunión esta tarde para poder planteárnoslo». No obstante, Armengol ha insistido en que «lo primero que debemos hacer es proteger la salud (...) sin salud no hay reactivación». Preguntada por los seis meses propuestos por el Gobierno para la prórroga del estado de alarma en España, Armengol ha ratificado que es un tiempo «absolutamente adecuado», y ha recordado que esta situación solo dispone un paraguas normativo amplio para que las autonomías adecuen las medidas a las necesidades de cada momento. «Queremos estar lo mejor posible en el menor tiempo posible», ha dicho. La Conferencia de Presidentes, a la que ha asistido la presidenta de la Comisión Europea, la alemana Ursula von der Leyen, ha tenido un amplio contenido económico. Sin embargo, Armengol ha declinado hablar de cantidades sobre los fondos europeos que llegarán a las Islas, un reparto que depende de la «capacidad de presentar proyectos en línea con lo dispuesto por la Comisión». Según Armengol, Baleares parte de una posición buena, puesto que «llevamos cinco años trabajando en estas líneas», y el ejecutivo dispone de «proyectos rápidamente ejecutables con inversiones potentes a nivel económico». El tranvía de la bahía de Palma podría ser un proyecto paradigmático en este sentido. También ha apuntado, entre otros, adaptar la FP a las nuevas demandas del mercado laboral, o feminizar profesiones muy masculinizadas como parte de los diez ejes tractores del Plan Nacional, basados en términos de transición ecológica, eficiencia, digitalización y modernización del país. «Yo he defendido que somos los que tenemos la peor situación, y los que necesitamos más ayuda somos nosotros», ha destacado la presidenta. Además ha reiterado por enésima vez su defensa de la necesidad de prorrogar los ERTE todo el tiempo que sea preciso, como salvaguarda para los profesionales y las empresas de las Islas.