El Govern publicó en el BOIB de ayer el paquete de nuevas medidas anunciadas el miércoles para frenar la propagación de la pandemia y advirtió de que «endurecerá» aun más las restricciones si no se consigue doblegar la curva de contagios.
La portavoz del Ejecutivo, Pilar Costa, señaló que las medidas «evolucionarán en función de la evolución de la pandemia». «Si las cifras no son positivas, tendremos que endurecer las medidas» y si surgen efecto se podrán suavizar, precisó la consellera de Presidència. Precisamente con el objetivo de evitar otras restricciones «debemos hacer pedagogía y explicar que estas medidas se toman por necesidad, para encontrar un equilibrio entre la seguridad sanitaria, la actividad económica y el día a día».
Las dos medidas más destacadas del paquete aprobado ayer, y que estarán en vigor durante un período de quince días como mínimo, son la prohibición de fumar en cualquier espacio público y la limitación de los encuentros a grupos de diez personas como máximo. Los que incumplan alguna de esas medidas podrán ser multados con entre 100 y 3.000 euros. El importe dependerá de las circunstancias, de si ha reiterado en el incumplimiento, etcétera. Destacan igualmente el cierre de las playas entre las 21 y las 7 horas, las limitaciones de asistencia a los entierros, velatorios y ceremonias nupciales, las nuevas restricciones para los actos culturales y deportivos multitudinarios y las reducciones de aforo establecidas para los bares y restaurantes, que finalmente se limitarán al 75 por ciento en caso de que el aforo máximo del local sea de 50 personas. El aforo en los locales de juego también quedará limitado a la mitad, así como el de los gimnasios, y las actividades de los clubes de gente mayor deberán suspenderse 15 días.
Todas estas medidas entraron ayer en vigor salvo las referidas a aforos, que se aplicarán a partir del lunes. Estas nuevas restricciones obligarán a realizar un esfuerzo extra a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, así como a los policías locales, a velar por su cumplimiento.
Más control
Guardia Civil y Policía Nacional intensificarán los controles para vigilar que la ciudadanía cumple con las normas sanitarias para frenar la propagación del coronavirus. Así se acordó ayer en una reunión entre la presidenta del Govern, Francina Armengol, y la delegada del Gobierno, Aina Calvo, en la que también participaron el jefe superior de la Policía Nacional, Gonzalo Manuel Espino, y el coronel jefe en Balears de la Guardia Civil, Alejandro Hernández Mosquera.
Govern y Gobierno buscan la máxima coordinación en la vigilancia de las medidas. Las policías locales también vigilarán el cumplimiento de estas restricciones, si bien los alcaldes de Mallorca trasladaron el jueves a la presidenta Armengol las dificultades que atraviesan para controlar que se cumplan las normas sanitarias debido a la falta de recursos de Policía Local que sufren sus municipio.
Por su parte, el Ajuntament de Palma informó que a las 20.00 horas de ayer comenzó a funcionar un operativo integrado por 15 policías, un subinspector, dos oficiales y un mayor para vigilar que las playas de la ciudad estén vacías entre las 21.00 y las 7.00 horas.
Por otra parte, Govern y Delegación del Gobierno iniciarán una campaña informativa para concienciar a la ciudadanía y se difundirá la información a través de los vehículos y helicópteros policiales. Armengol hizo hincapié ayer a los máximos responsables de la Guardía Civil y la Policía Nacional de que los agentes conciencien a la ciudadanía de la importancia de cumplir las normas para contener el virus
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.