El Congreso de los Diputados ha iniciado el trámite de reforma del Estatut d'Autonomia de Baleares para suprimir uno de los privilegios de la clase política: el aforamiento. A diferencia de lo que sucede con los ciudadanos, cuando un diputado del Parlament o miembro del Govern tiene un caso judicial en su contra, el asunto no lo tramita un juez ordinario sino el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB).

Todos los partidos políticos de las Islas se pusieron de acuerdo para suprimir este privilegio y el Parlament balear aprobó hace unos meses una propuesta para modificar el Estatut y eliminar los artículos en los que se hace referencia a esta distinción.

Esta propuesta llegó al Congreso ya que las modificaciones de los estatutos de autonomía deben hacerlas las Cortes porque es allí donde se aprueban las leyes orgánicas.La presidenta del Congreso, Ana Pastor, acaba de enviar un escrito al Parlament balear en el que le comunica que la Mesa del Congreso ya ha aceptado a trámite la propuesta y así se lo ha trasladado el Gobierno para que también tenga constancia de ello.

Tres representantes

Pastor recuerda en su escrito que el Parlament balear debe designar ahora a sus representantes para defienden la propuesta de modificación del Estatut en el pleno de la Cámara Baja. Será la Mesa y Junta de Portavoces quien elija a estos tres diputados.

La supresión de los aforamientos afecta en la actualidad a un total de 70 políticos de Balears: los 59 diputados del Parlament más los once miembros del Govern.