«El asunto de Gijón es muy triste, pero lo primero es el partido»

¿Cómo ve la situación de Álvaro Gijón, queriendo mantener sus actas de diputado y de concejal?

–Nos presentó su renuncia como afiliado del PP. Es una situación desagradable. Me hago cargo de los momentos tan difíciles que está pasando. Y lo siento mucho. También le hemos pedido que renuncie al acta de diputado y de concejal de Cort. Eso es necesario para el partido en estos momentos. No es bueno para nadie hacer más grande el Grupo Mixto. Ya hemos visto que eso ya le ha pasado a otro partido con Xelo Huertas y Montse Seijas. Debemos garantizar que el partido funcione bien en las instituciones.

Pero lo cierto es que usted lleva pocos meses como presidente y ya ha tenido que enfrentarse a escándalos muy fuertes. Su partido está preocupado...

–Para mí la presunción de inocencia es un valor fundamental y así lo defiendo para Álvaro Gijón como para quien sea. De la misma manera hay que dejar que la justicia haga su trabajo y que sea lo más rápida posible. Hemos de afrontar esta situación con mucha prudencia. Pero lo primero es el partido.

En el caso de Gijón, aunque esté aforado, han detenido a su padre, su madre y su hermano...

–Pero a sus padres lo liberaron a las pocas horas y a su hermano al día siguiente. Insisto: la Justicia ha de trabajar.

Usted fue elegido president con un gran apoyo en la Part Forana pero mucho más estrecho en Palma, ¿le aclara el panorama a usted y a Marga Durán el asunto de Gijón?

–En Palma se presentan tres candidatos que merecen todo el respeto. Marga Durán ha desarrollado un gran trabajo ejerciendo la oposición en Cort y eso no lo puede discutir nadie. Es una candidata sólida.

¿Cómo ve al partido tres meses después de haber asumido la presidencia?

–Mi objetivo es es el trabajo en equipo, la capacidad de crear grupos de trabajo, de dar pasos serios y medidos y de tener claro que nuestro trabajo ha de aportar estabilidad social. Uno de mis proyecto es crear estructura de partido, que todos se sientan últiles.

¿Pero acaso en el PP no mandaban sólo tres o cuatro hasta hace sólo dos años? ¿No era total el poder de Bauzá? ¿No era intocable el ‘rodriguismo'?

–Hemos de superar los ‘ismos' y los 'istas'. Aquí no hay ni ‘rodriguismos', ni ‘bauzanismos', ni ‘companyismos'. Hemos de avanzar con visión de conjunto. Si mi paso por la presidencia ha de servir para algo es para superar este tipo de partidismos internos. Lo primero es servir a los ciudadanos.

Pero usted no lo ha tenido fácil, durante su proceso interno el sector de Bauzá le calificó de nacionalista. ¿Qué piensa?

–Que, evidentemente, no es así y que estamos dejando atrás las etiquetas. Hemos de ser integradores y no excluyentes dentro de este gran proyecto. Cuando llegue el momento, el electorado sabrá valorarlo. Somos un equipo unido. Y un equipo, lo primero que tiene que hacer es trabajar con seriedad y compromiso.

¿Se le ha allanado el panorama con la marcha de Rodríguez y un Bauzá en horas bajas?

–Hemos de conseguir esta unión, que es imprescindible.

¿Qué planes tiene usted para recuperar al menos diez diputados en menos de dos años?

–El objetivo del PP es ganar y poder gobernar. Muchas veces hemos ganado y luego hemos perdido el poder, alguna vez con 29 diputados. Francina Armengol es presidenta con los peores resultados del PSOE. Nosotros, con muchos más votos, nos vamos a la oposición.

¿Por qué el PP se pelea tan a menudo con sus vecinos ideológicos?

–Este es un problema evidente. Hemos de ser capaces de llegar a acuerdos con otras fuerzas que nos sean afines o cercanas, sobre todo si son beneficiosos para la sociedad. Es verdad que hemos arrastrado en el pasado este problema de no poder sellar acuerdos, pero hemos de superarlo a base de trabajo y de capacidad de diálogo, con prudencia y con inteligencia.

¿Qué planes tiene para reanimar al PP?

–El partido tiene que estar mucho más vivo, presente en diferentes ámbitos, aportando nuevas visiones de trabajo. Debe funcionar como estructura organizada. Debemos ser capaces de desarrollar una oposición muy constructiva, en que la gente nos vea capaces de gobernar. En definitiva, es una cuestión de trabajar teniendo claro que queremos.

¿Cómo ve el funcionamiento del Govern Armengol?

–No tiene proyecto. Están centrados en mantenerse en el poder como sea con un Podemos que está roto por dentro. Si lo analizamos bien, viven un auténtico caos. Lo que pasa es que tienen la suerte de que la situación económica les acompaña, pero no por sus méritos. Eso nos anima a seguir trabajando, porque una legislatura más en esta situación políticamente tan caótica puede llegar a ser muy perjudicial para el conjunto de la sociedad. Sería muy difícil de soportar.

¿Defiende una mejor financiación para Balears?

–Por supuesto. Es evidente que el actual sistema es perjudicial para nosotros. Recordemos que lo, puso en marcha Zapatero y que el PSOE lo aceptó. Y quiero recordar que el Régimen Especial fue una iniciativa y una reivindicación de nuestro partido hace ya muchos años. Siempre hemos estado del lado de conseguir lo mejor para las Balears. Hemos de seguir adelante.