Una empleada de Nóos, que realizó funciones de secretaria para Iñaki Urdangarin, ha testificado este jueves que concertó varias reuniones entre el marido de la infanta Cristina y el entonces presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps.
En su declaración como acusado en el juicio de Nóos el pasado 2 de marzo, Urdangarin se refirió a una sola reunión con Camps celebrada en Valencia para comentar el proyecto de Juegos Europeos, mientras que cuando compareció como testigo durante la instrucción en abril de 2014 el expresidente autonómico aseguró que sólo había coincidido con el cuñado del Rey en actos institucionales.
«Alguna reunión tuvieron, alguna vez hablé con la secretaria del señor Camps» para concertar citas con Urdangarin, ha manifestado ante la Audiencia de Palma María Ángeles Almazán, que ha declarado que entró a trabajar en Nóos Consultoría a principios de 2005 y estuvo empleada durante un año y medio.
Aunque comenzó con otras funciones, todas de carácter administrativo, pronto asumió trabajos «de apoyo» para Iñaki Urdangarin entre los que estaba la gestión puntual de su agenda en cuestiones relativas al Instituto Nóos, ha testificado.
La empleada, que indicaba a los proveedores con los que trataba que facturaran a Nóos Consultoría, ha explicado que para ella esa sociedad y la asociación sin ánimo de lucro Instituto Nóos «eran la misma empresa».
La antigua trabajadora de Nóos ha provocado la sonrisa del fiscal, Pedro Horrach, cuando a su pregunta de si mantuvo algún tipo de contacto con la Casa Real ha respondido que «no directamente con el Rey», pero sí con el secretario de las infantas, Carlos García Revenga.
Su labor de asistente del marido de la Infanta concluyó cuando en 2006 el entonces duque de Palma se desvinculó de Nóos por indicación de la Casa Real. «Me dijeron: 'Iñaki ya no va a trabajar aquí, vete para casa y disfruta de tu embarazo», ya que estaba encinta, ha relatado.
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Pero seguro que Urdangarín tampoco lo recuerda. La avaricia rompe el saco