En las últimas semanas vuelven a escucharse cantos de sirena en la zona noble de Can Misses, un estadio con mucha tradición en atraer presuntos inversores foráneos. Ocurrió con el grupo Tarradellas y el magnate egipcio en la época de Pedro Ortega al frente de la SE Eivissa, y más recientemente, con los italianos Antonio Stinà o Emanuele Maffezoni bajo la nomenclatura de UD Ibiza-Eivissa.

Quizá por ello, en el entorno del club desconfían sobre la credibilidad del último grupo inversor interesado en tomar las riendas del Atlético Isleño Ibiza. Con el recurrente reclamo de la marca ‘Ibiza', una agrupación de empresarios con sede en Barcelona viene tanteando desde meses atrás las posibilidades de futuro del club que preside Vicente Torres, ‘Murtera'. A finales de la semana pasada, un emisario de este grupo inversor se personó en la Isla para conocer de cerca los cimientos de la entidad azulona; su estructura económica, social y deportiva. Su viabilidad y otros agentes como el factor riesgo.

El objetivo, rescatar a corto plazo a un club que atraviesa por graves problemas presupuestarios y convertirlo, a largo plazo, en una Sociedad Anónima Deportiva (SAD). En otras palabras, tomar las riendas de la entidad para promocionar su imagen. Exportar el producto de la isla más famosa del Mediterráneo. Lo de siempre, vamos. Los nombres de estos inversores y la cuantía económica que esperan inyectar no ha trascendido, pero según fuentes del club parece difícil que se concrete un acuerdo oficial en las próximas fechas.

Acuerdo con la plantilla

Entretanto, la plantilla que dirige Antonio Asensio y que tan buen rendimiento está ofreciendo en su segunda temporada en Tercera División acumula dos meses sin percibir sus emolumentos, además de primas por objetivos correspondientes al pasado ejercicio. Este lunes, la directiva bajó al vestuario azulón para poner las cartas boca arriba, dar la cara ante sus futbolistas y comprometerse a pagar al menos una de las mensualidad que adeuda a sus jugadores antes de que finalice el año.

La cúpula del club trasladó a su plantilla el esfuerzo que está realizando para conseguir liquidez y los problemas que está padeciendo para ingresar dinero acordado con patrocinadores. La plantilla recogió el guante por parte de la directiva a la espera de comprobar su grado de compromiso. Uno de los términos que establecieron los futbolistas en ese acuerdo de ‘caballeros' es no acumular más mensualidades. De lo contrario, y pese a la excelente campaña que están firmando, podrían verse obligados a abandonar la nave isleña. Algún miembro de la plantilla, como Juan Manuel García, ‘Chiki', ya había explotado días atrás emprendiendo una huelga que seguía vigente hasta el día de ayer.

La situación en otros departamentos del club es también insostenible. Técnicos y trabajadores no han percibido dinero alguno en lo que va de temporada y el litigio con el cuerpo técnico y con varios entrenadores de la campaña precedente continúa abierto.