La Peña Deportiva ha sufrido su quinta derrota consecutiva este domingo ante el Europa (1-2). Los de Santa Eulària, que fallaron un penalti, se adelantaron, pero vieron como en la segunda parte los catalanes le dieron la vuelta al partido.
El choque comenzó con un Europa dominador y una Peña que buscaba el balón en largo a la espalda de los centrales. La primera gran ocasión fue para los visitantes. Mahícas remató un saque de esquina, pero Picón estuvo soberbio para evitar el tanto cuando se había superado el minuto 10.
En el 25, llegó una de las jugadas claves del partido. Tras un disparo desde la frontal, el balón tocó en las manos de un defensor y el árbitro señaló penalti para la Peña. Fraile tomó la responsabilidad, pero su lanzamiento no tuvo ni fuerza ni dirección y Flere no tuvo problemas para evitar. Desperdiciaban los locales la oportunidad de ponerse por delante.
Eso sí, esa jugada cambió el choque y si hasta ese momento el dominio del cuero era catalán, pasó a ser ibicenco. Fraile, en el 31, aprovechó un balón en largo de Picón para ganarle la carrera a los centrales y aprovechar el bote para superar por alto al guardameta visitante. Con este 1-0 se llegó al descanso.
El Europa realizó un triple cambio que le vino muy bien. Aunque la primera ocasión fue para los de Alberto Gallego, en una acción en la que Montalbán no estuvo fino para hacer el 2-0, eran los barceloneses los que mandaban en este segundo tiempo.
Fruto de ese dominio llegó el empate de Jordi Cano que, en el 58, aprovechó un balón al espacio para superar a Picón y poner el 1-1 en el marcador. El tanto sentó bien al Europa y mal a la Peña y ocho minutos más tarde, Pimentel le daba la vuelta al marcador.
La Peña se lanzó de nuevo a por el empate y estuvo a punto de encontrarle en una acción de Gonpi, que debutaba y llevaba unos minutos sobre el terreno de juego, pero su disparo fue salvado bajo palos por un defensor. El Europa también tuvo la sentencia en un mano a mano de Jordi Cano, pero Picón volvió a estar enorme para evitar el gol.
En el tramo final fue un asedio total de los ibicencos, pero aunque apretaron y tuvieron alguna opción, faltó puntería y la derrota se confirmó. La quinta consecutiva. Las alarmas están encendidas en Santa Eulària con los puestos de descenso cada vez más cerca.
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