El Municipal de Santa Eulària vivió este sábado un nuevo episodio vergonzoso. En un partido de benjamines, niños de ocho y nueve años, entre el Santa Eulalia y el Ibiza Insular del Ibiza Islas Pitiusas se increpó con dureza al colegiado del choque, un joven de 18 años. A grito de «sinvergüenza», una aficionada saltó al terreno de juego a esperar al árbitro mientras este se retiraba. A su vez, otra mujer desde la grada le decía: «Vete a llorar a tu casa».

El motivo de este vergonzoso comportamiento por parte de algunos aficionados fue una de las últimas acciones del partido en la que el equipo visitante acabó empatando (4-4). Además, el árbitro también expulsó al entrenador local.

No es la primera vez que el fútbol ibicenco se ve salpicado por un episodio de este calibre, en el que el ejemplo para los jóvenes jugadores está muy fuera de lugar. La Peña Deportiva se mostró avergonzada por las imágenes vividas y emitió el siguiente comunicado: «En relación a los hechos acontecidos esta mañana en el fútbol base, la SCR Peña Deportiva quiere condenar enérgicamente cualquier tipo de comportamiento racista o violento. Desde la Peña Deportiva nos avergüenza lo sucedido y lamentamos profundamente los insultos que unos pocos aficionados llevaron a cabo contra el árbitro en el encuentro de categorías inferiores disputado en la mañana de este sábado».

«Desde el momento que se tuvieron constancia de los hechos, hemos empezado a trabajar para identificar a las personas culpables y tomaremos medidas severas para que no se vuelvan a repetir este tipo de sucesos. Además, la próxima semana, la dirección de cantera ha convocado a los familiares de todos los jugadores de nuestro fútbol base para concienciar sobre estos actos que no representan ni al club ni a la afición peñista», finaliza el escrito.