Una nueva era celeste

La racha de los celestes es terrible con solo dos puntos de los últimos 27 jugados o lo que es lo mismo, nueve partidos consecutivos sin conocer la victoria. Una caída en la tabla que les ha llevado a caer la semana pasada al farolillo rojo.

La situación en Zaragoza tampoco es buena. Sin ser tan crítica como la de los pitiusos, los aragoneses llevan cuatro jornadas sin ganar y están muy lejos de ese objetivo con el que partían de luchar por los puestos de playoff y soñar con un posible ascenso. También los de La Romareda han cambiado de técnico en este inicio de curso. Un viejo conocido del afición celeste como Juan Carlos Carcedo fue cesado hace menos de un meses y ahora es Fran Escribá, que todavía no conoce la victoria, el que dirige ese barco.

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Rival directo

El conjunto aragonés sólo tiene dos puntos de ventaja con respecto al descenso y por eso una derrota de los de Alcaraz haría que se escapase uno de esos equipos que marcan la salvación. Un dato a tener en cuenta es que el Zaragoza es uno de los peores equipos como locales, con dos victorias y cuatro victorias en los ocho partidos disputados en su feudo; si bien es cierto que la Udé es el segundo peor visitante con solo cuatro puntos a domicilio.

Alcaraz ha pedido un equipo compacto y decidido, pero será difícil adivinar una alineación en la que no estarán los sancionados Goldar, por acumulación de amarillas, Diop y Morante, por roja directa. A estos se suma la baja confirmada de Gálvez por lesión y la duda de Castel.

Por su parte, Escribá, que no podrá estar en el banquillo por segunda jornada consecutiva al estar sancionado con cuatro partidos de su época en el Elche la temporada pasada, contará con las bajas de Petrovic, por sanción, y Cristian Alvarez e Iván Azón por lesión.