El voleibol ibicenco despejó dudas este martes. La UD Ibiza Ushuaïa saldrá a competir en Superliga 2. El presidente de la entidad, Mariano Esteban, aseguró este martes a Periódico de Ibiza y Formentera que pagarán el canon de plaza y estarán en la segunda división del voleibol español tras el reciente descenso. Eso sí, la duda está en la plantilla con la que contará, ya que el club se encuentra actualmente negociando con diferentes patrocinadores para cuadrar las cuentas y ver qué presupuesto tendrá para confeccionar la plantilla.
La UD Ibiza volverá a ser el patrocinador principal, eso sí la cuantía que da el club de fútbol será sensiblemente menor a la del curso pasado. La pérdida de categoría hace que la entidad que preside Amadeo Salvo reduzca su aportación econonómica.
El otro pilar económico histórico ha sido Ushuaïa. El club está negociando con este sponsor para intentar alargar su patrocinio. Además, también se mantienen conversaciones con otras grandes empresas. Ushuaïa es la prioridad, pero si no se llega a un acuerdo con ellos, el club podría cambiar de nombre y salir a competir con otro apellido.
Aprender del pasado
Estas negociaciones son clave de cara a las aspiraciones del equipo, ya que el club tiene claro que no se puede anteponer lo deportivo a lo económico. «No vamos a cometer errores del pasado. Debemos tener muy claro el presupuesto con el que contamos y no salirnos de esos márgenes. Hay unas líneas rojas que no cruzaremos», explicó Mariano Esteban.
Así pues, aunque el club ya tiene a varios jugadores «apalabrados», la intención es no firmar a nadie sin antes tener cerrado los acuerdos de patrocinio. Todo hace indicar que si las negociaciones llegan a buen puerto, la UD Ibiza Ushuaïa saldrá en Superliga 2 con un equipo de garantías para pelear por el ascenso. Al menos esa es la intención de los celestes. «No se puede prometer subir, pero la intención es hacer un equipo competitivo que se clasifique para el playoff y pelee por ello», señaló el presidente del club.
Cabe recordar que la UD Ibiza Ushuaïa descendió en un año para olvidar. Tras 10 temporadas en la élite con proyectos ilusionantes en los que se llegó a jugar el playoff por el título, además de varias participaciones en la Copa del Rey, los pitiusos finalizaron en última posición. Fue una temporada decepcionante que desde el propio club no dudaron en calificar como «fracaso». Condicionado en lo económico, eno se logró hacer un equipo a la altura de la categoría. Desde el primer momento se vio que no sería una temporada sencilla y se acabó consumando el doloroso descenso.
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