Robert Pirès, campeón del mundo con la selección de Francia en 1998, entra cada tarde al Municipal de Santa Eulària, baja a los vestuarios, se enfunda la equipación del cuerpo técnico y sale al campo con el equipo. Esta rutina se repite desde octubre, poco después de que el exfutbolista profesional se mudara a Ibiza con su familia y decidiera involucrarse con el club.
Pirès, conocido sobre todo por su carrera en el Arsenal (2000), el Villarreal (2006) y en la selección francesa campeona del mundo en 1998 y de la Eurocopa en 2000, se ha integrado al cuerpo técnico de la Peña, entre otras cosas, como readaptador, trabajando con los jugadores lesionados hasta que pueden volver a incorporarse al equipo, labor que realizaba en el Arsenal hasta poco antes de trasladarse a Ibiza en agosto del pasado año con su familia.
La relación entre Pirès y la Peña Deportiva se inició el pasado verano, cuando los dos hijos del francés, Alessio, de 9 años, y Theo, de 13, se integraron a la base del club para jugar al fútbol. «Mi mujer, mis tres hijos y yo decidimos en agosto dejar Londres y trasladarnos a vivir a Ibiza porque el Brexit y el covid cambió mucho la vida en Inglaterra. Alquilamos una casa en Santa Eulària y todos nos hemos adaptado muy bien a la isla», explicó el galo.
Fue una tarde de septiembre, mientras el primer equipo estiraba en el campo, cuando a Raúl Gómez le pareció ver a lo lejos a uno de sus ídolos del fútbol, Robert Pirès. «Lo seguía desde que jugaba en el Olympique de Marsella y cuando fichó por el Arsenal me hice seguidor del equipo inglés. Luego coincidimos en el Villarreal, yo en el filial y él en el primer equipo, pero nunca habíamos hablado. Y de repente lo veo en la Peña. Al principio dudaba de que fuera él, pero le grité: ‘Robert'. Se dio la vuelta. Empezamos a hablar y me comentó que le encantaría involucrarse en el club, así que le presenté a Raúl Casañ», relató Gómez.
El jugador del Arsenal, a quien le encanta meterse en los rondos de entrenamiento del equipo, explicó que su papel en el conjunto es «ayudar en todo lo que me pidan». En ocasiones los jugadores le hacen preguntas técnicas y, en otras, más personales. «A veces me han consultado cómo pueden hacer para manejar la presión que tienen porque marcan pocos goles o qué se siente al ganar una Copa del Mundo y la Eurocopa» reveló el galo.
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