La fase de ascenso, lejos de Ibiza

La sede de la organización de este playoff está en el aire y muchos se preguntan si el conjunto de Eugenio Tilves podría celebrar la fase en casa. Eso corresponderá a alguno de los clubes que consigan la clasificación, reservada a los dos primeros clasificados al término del presente curso.

Al igual que el Puchi organizó la de ascenso a División de Honor femenina en el ejercicio 2016-17, en la que, además, dio el salto de categoría, el club naranja tiene derecho a solicitar ser sede en caso de clasificarse. Sin embargo, bien Jesús Prieto, presidente de la entidad, lo descarta a día de hoy por su elevado coste.

«Para nosotros es inviable económicamente», afirmó el mandamás del club, que cifró en «unos 25.000 euros» el coste de la fase. «En principio, salvo que salga un mecenas, no tenemos la intención de pedirla si nos clasificamos», apuntó.

El directivo apuntó que «la fase la pueden empezar a pedir los clubes que matemáticamente se metan en el playoff». «En nuestro grupo, al paso que vamos, no parece que nadie pueda intentarlo hasta las dos o, como mucho, tres últimas jornadas porque andamos tres equipos muy pegados. Uno se tendrá que quedar fuera. No sé cuál será», explicó.

Buena parte de las opciones de clasificación para la fase de ascenso por parte del HC Playasol Eivissa pasan por el resultado del encuentro contra el Sporting Alicante, segundo, que ha sido aplazado por el coronavirus. «Nos jugamos el 80 por ciento. Si ganásemos por más de tres, que es muy complicado, tendríamos un 80 por ciento a nuestro favor», apuntó el presidente del club naranja.