Rafa Ramírez, acompañado por Andrés Planells y su hermano José, posa con la placa que le regaló ayer el Ayuntamiento de Santa Eulària.

El tenis de mesa ibicenco se queda sin uno de sus padres, sin uno de sus principales impulsores. Rafa Ramírez, director técnico del CTT Santa Eulària y entrenador del Covicsa de Superdivisión, deja la isla después de diez años, tal y como publicó ayer Periódico de Ibiza y Formentera. Ramírez ha tomado la decisión de iniciar un proyecto personal lejos de Ibiza.

En la rueda de prensa de despedida, Rafa estuvo acompañado por su hermano José, delegado insular de tenis de mesa, y Andrés Planells, coordinador de Esports del Ayuntamiento de Santa Eulària. Ramírez hizo balance de sus diez años en la isla y explicó ese nuevo proyecto que tiene entre manos y que consistirá en una web en la que ofrecerá sus conocimientos deportivos a todo el que quiera contratarle: «Voy a ser el primer entrenador y asesor de España que haga esto».

El técnico aseguró que, aunque «está muy a gusto» en la isla, quiere comenzar ese nuevo camino que le «llena mucho». «Me encanta hacer planificaciones. Aquí ha venido mucha gente que me pasa vídeos y yo les corrijo. La idea es hacer planificaciones tácticas y técnicas, poner unos ejes de trabajo y decirles: ‘Dentro de dos meses voy a volver y tienes que haber mejorado esto'. Ya lo estoy haciendo gratis, pero el año que viene será cobrando. Ya tengo un equipo y varias federaciones territoriales que están interesadas», explicó.

En esa misma línea, comentó que le gustaría poder crear una red de entrenadores que ayudase a impulsar el nivel del tenis de mesa nacional. «En España el tenis de mesa está creciendo, pero a nivel de entrenadores aún no hay mucho nivel. Yo he tenido la suerte de formarme con gente muy buena. He ido por toda Europa cuando era joven. He tenido la suerte de que mi hermana ha ido a China y ella me ha explico todo lo que hacían allí.

Entonces, me siento un privilegiado a nivel de España y me gustaría crear una red para que los jugadores jóvenes vayan mejorando», explicó.

Los números de la familia Ramírez están ahí, como él mismo recordó, echando la vista al pasado: «Cuando empezamos, teníamos dos mesas en un almacén». Ahora, Ibiza es todo un referente en este deporte a nivel balear. De dos equipos se han pasado a cinco. Todos ellos han jugado en categoría nacional. Casi todos los colegios tienen mesas para que los más jóvenes puedan conocer este deporte y a nivel de base las medallas son numerosas.
Al ser cuestionado por qué cosas se queda, Ramírez confesó: «Lo más importante es que vine a Ibiza con unas expectativas y las he superado a nivel personal». También destacó el crecimiento de este deporte: «Ibiza tiene un futuro muy grande porque tenemos el material para seguir creciendo».

Futuro del club
En cuanto al futuro del Covicsa, de la Superdivisión femenina, Ramírez aseguró que cree que la próxima temporada será la mejor de la historia del club porque podrán llegar buenas jugadoras. «No dejo de ser un entrenador caro por el piso tal y como está la cosa en Ibiza. Creo que es algo muy bueno para las dos partes. El club seguirá creciendo porque los que se quedan están más que preparados», dijo.

Por otro lado, aunque aún no hay nada cerrado y todo se sabrá oficialmente la próxima semana, Rafa dejó entrever que el equipo quedará en manos de su hermano José: «Mi hermano es una apuesta personal. Él ha cogido el relevo este año. Yo ya sabía que me iba y he hecho más de becario que de entrenador. Para mí es un orgullo, porque es la persona en la que más tiempo he empleado para formarle como entrenador y veo que está capacitado. Yo puedo dejar Ibiza, que es como si fuese mi familia, porque la dejo en manos de una persona que puede seguir creciendo».

La isla pierde un referente deportivo, aunque no lo hace del todo. Aunque estará lejos, Rafa aseguró que echará una mano siempre que pueda y visitará la isla mensualmente para ver a su familia.