Los peñistas, contentos tras conocer el emparejamiento con el Tamaraceite. | DANIEL ESPINOSA

La Peña Deportiva conoció ayer el nombre de su rival en la eliminatoria directa por el ascenso a Segunda División B. El sorteo celebrado en la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) le emparejó con el Tamaraceite, campeón del grupo canario, siendo el partido de vuelta en Santa Eulària. También se supo el primer adversario de un Formentera que, al no haber sido campeón de grupo, deberá superar tres rondas para conseguir el salto de categoría. En ese camino, el primer obstáculo a salvar es el Cacereño, subcampeón del grupo extremeño.

LOS CANARIOS
Sobre el papel, las cifras del conjunto canario no son tan contundentes como las del conjunto de Raúl Casañ. El contrincante de los de Santa Eulària cosechó 18 victorias, 13 empates y siete derrotas en 38 jornadas para totalizar 67 puntos en la fase regular, con un balance de 61 goles a favor y 33 en contra.

La Peña ha sido un rodillo en el grupo balear, en el que ha arrasado por completo. Los de Raúl Casañ lograron 98 puntos en 40 jornadas, con 40 31 triunfos, cinco tablas y cuatro reveses. Los santaeularienses marcaron 88 tantos y encajaron 28.

El Tamaraceite, un club con un destacable potencial económico, está presidido por Héctor Ramírez, hermano del mandamás de la UD Las Palmas. Ha conseguido tres ascensos consecutivos para avanzar de Segunda Regional a Tercera. En sus filas cuenta con jugadores con experiencia en la Liga de Fútbol Profesional (LFP) tales como David González, David Figueroa y Aythami Álvarez, que jugaron en Las Palmas, o López Silva, que jugó con el Córdoba en Primera y Segunda.

Raúl Casañ, entrenador de la Peña, se mostró indiferente por el resultado del sorteo: «Me daba igual el que tocara porque todos son primeros, buenos y con buenos jugadores. Por nombre, del Tamaraceite no conocemos ni su campo ni jugadores. Es el equipo más lejano que nos podía tocar, pero no deja de ser un equipo más y tendremos que estar bien para pasar». El técnico añadió que espera «con muchas ganas e ilusión» el enfrentamiento.

LOS EXTREMEÑOS
Las cifras del Cacereño son parejas a las del Formentera. El cuadro extremeño sumó 80 puntos en 38 jornadas con un bagaje de 24 victorias, ocho empates, seis derrotas, 71 goles a favor y 26 en contra. Por su parte, los de la pitiusa sur cerraron la fase regular con 85 puntos en 40 jornadas merced a un balance de 25 triunfos, diez tablas y cinco reveses. Transformaron 70 dianas y recibieron 28.

El Cacereño llegó a jugar en Segunda en la temporada 1952-53 y ha estado 18 campañas en Segunda B. La última vez que actuó en la categoría de bronce fue en el curso 2015-2016.

Iván Gómez, entrenador de los rojinegros, reconoció que le toca «indagar y sacar toda la información posible» sobre su rival. «Ahora mismo, toque el que te toque es complicado. Todos quieren subir», comentó el preparador, para quien «el desplazamiento será complicado, pero tanto para ellos como para nosotros».

Xicu Ferrer, presidente del Formentera, habló en una línea similar: «Conocemos poco de este equipo. En cuanto al desplazamiento, es de los peores que teníamos». Por su parte, el futbolista Samuel San José, indicó que la idea es «sacar un buen resultado en casa y afrontar la vuelta con garantías». En cuanto al hecho de jugar la vuelta en césped natural, comentó que «no es un obstáculo».