El Puchi dice adiós a la máxima categoría

Razones

Los motivos que han llevado al HC Puig d'en Valls a tomar esta decisión no son otros que el hecho de carecer de suficientes jugadoras locales de nivel para la primera plantilla, lo que les obligaba a traer muchas de fuera de las Pitiusas: «No vemos viable, por nuestros valores, jugar en la máxima categoría, porque no nos apetece tener un equipo con 14 o 15 jugadoras de fuera. No nos apetece el sacrifico que lleva para gente que viene aquí por dinero. Hoy están y mañana no están. Si no es por gente de la casa, es un esfuerzo muy grande que creemos que no merece la pena».

El presidente destacó que «desde el primer momento se quería jugar en la primera categoría». «Pero, cuando ves que una se retira, otra se va fuera y otra se marcha a estudiar inglés, te das cuenta que no es viable. Nos da mucha pena», explicó.

Una vez adoptada esta postura, las fuerzas se centrarán ahora en la confección de la plantilla al tiempo que se termina de cerrar el citado acuerdo con algún club de Plata. Noel Cardona ya anunció que no seguiría como entrenador del equipo y la entidad azul trabajara para encontrar sustituto. De hecho, Ferrer indicó que buscan «más de un entrenador» con el objetivo de trabajar por y para la cantera.

En cuanto al capítulo de renovaciones, cabe destacar que ya son tres las que han confirmado que seguirán el próximo curso: Ana Boned, Jillian Princess Macasaet y Ana Muñoz. Además, también seguirán algunas de las jugadora foráneas del pasado curso. Ferrer dejó claro que «el objetivo «no será jugar la fase de ascenso ni subir». «Haremos un equipo para que la gente de la cantera se vea representada en él y para que haya balonmano de categoría nacional en Ibiza».

Un año para el recuerdo

El presidente del HC Puig d'en Valls destacó que «ha sido un año muy bonito». «Lo hemos pasado muy bien. Ha sido un sueño para nosotros. Hemos sido el primer equipo en la historia de Balears en llegar a la máxima categoría nacional. Hay muy pocos clubes a nivel nacional que puedan haber competido en la máxima categoría con prácticamente más de la mitad formadas en su cantera. Bueno, esto no es un adiós, más bien esperamos que sea un hasta pronto. Damos un pasito atrás para seguir trabajando y fomentar el trabajo de base. No hay que perder nuestros valores y hay que saber de dónde venimos», expuso.

En una línea similar se pronunció Ana Boned, capitana del equipo: «La sensación que tengo es que es lo más bonito que he vivido nunca, balonmanísticamente hablando. Fue brutal tener a toda la isla volcada con nosotros». Eso sí, apuntó que fue un año «muy difícil y duro». «No ha sido un camino de rosas», agregó la jugadora, que también comparte la filosofía de que «no se puede depender de las jugadoras de fuera».